La mano peluda: El episodio maldito: del radio a las entrañas del teatro

Recuerdo las noches en las que, con un IPod viejo, me ponía a oír La mano peluda debajo de las sábanas de mi cama a escondidas de mi padre. ¿Qué tanto miedo podía dar un programa de radio? Pues, a veces, no podía dormir. Pero a pesar de las pesadillas que me podía ocasionar, era adicto. Ahora esta experiencia busca replicarse en un formato totalmente distinto con la puesta en escena La Mano Peluda: El episodio maldito. Y es que no solo se trata de escenificar una historia sino de crear toda una experiencia sensorial y te contamos de qué va de la mano de su director y dramaturgo, José Manuel López Velarde, con quien hablamos. 

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¿Cómo es ir a La mano peluda: El episodio maldito?

Decimos que es una experiencia porque justo se arma como algo distinto a una obra convencional. López Velarde nos dice: “Encontramos una sala oculta del teatro que está detrás de una puerta que estaba tapada. El público entra por esa puerta y no por la taquilla o por el lobby. Esta parte de atrás está también ambientada, y entonces entra a las entrañas de este teatro”. 

A esto se suma que cada espectador debe de ponerse unos audífonos para vivir la experiencia sonora completa a la par que un actor escenifica el drama. “Aprovechando que que La mano peluda era este programa de radio y que lo íbamos a hacer en teatro -nos cuenta el director-, quise es usar esta convención en la que el público escucha a través de unos audífonos materiales que desde la ficción son de un supuesto hijo del conductor de la mano peluda que los encuentra como un material”. 

¿De qué trata? 

Con esto ya podemos ir entrando en la historia que justo habla de este hombre escéptico que investiga la desaparición de su padre que murió en circunstancias misteriosas. El juego entre lo ficcional y lo real se vuelve muy interesante gracias al diseño sonoro y a las mismas grabaciones del programa. 

Sobre esto último José Manuel nos dice: “Eso tiene mucho que ver con el cine de terror, yo no era muy fan del cine terror, me puse a investigar también como están contadas. Obviamente también conté con un equipo que se dedica a hacer diseño sonoro, grabamos todos esos audios que son muy detallados en su ambiente. O sea tenemos cosas que son susurradas, otras que son gritadas, estamos en espacios enormes en espacios pequeños y todo eso se tuvo que construir de cero”.

Esta obra atrae cada semana a más personas en palabras de su director lo que solo puede ser señal de que se recomienda de boca en boca. Para nosotros también es una experiencia que merece ser vivida al menos una vez si amas el terror bien contado. 

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