Código Bolero: La dulce limerencia.
Foto: Alfredo Millán

Código Bolero: La dulce limerencia

Esta obra hace una interesante y propositiva fusión entre el teatro y la radio, además de homenajear a un género tan amado.
  • Teatro
  • Centro Nacional de las Artes, Churubusco Country Club
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Time Out dice

Lo que Código Bolero logra nos parece francamente fantástico. No solo innova con las reglas del teatro, dándole un toque discursivo distinto al incorporar de una forma innovadora la radio y rendirle homenaje a un género musical tan querido en México: Los boleros. Por eso hablamos con su creador Jaime Camarena para ver qué secretos guarda la puesta en escena. 

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¿Cómo ha evolucionado y qué has aprendido de esta puesta en escena?

Nosotros estrenamos Código Bolero en el Palacio de Bellas Artes en 2017. Fue una inquietud de indagar en lo que consideramos que es la educación emocional del mexicano. El bolero es una expresión que se instaura desde hace mucho tiempo, con la primera partitura “Tristezas” apareciendo en 1871. Comenzamos a investigar la educación emocional, y notamos esta suerte de “invalidez emocional” que tenemos en nuestra cultura.

La obra arrancó en 2017 y empezó a generar una muy buena inercia, pero luego llegó la pandemia, interrumpiendo la propagación de la puesta en escena. Este año, finalmente, hemos retomado el proyecto. He estudiado mucho sobre teatro y sobre las reacciones emocionales que vienen de ciertas experiencias. Aunque la estructura de la obra es prácticamente la misma, con algunos cambios en las canciones, creo que ahora tiene un tono más acertado. La veo mucho más consistente.

Otra de las cosas que me llama la atención es el título de la obra, Limerencia. Esta palabra refiere a un deseo de amar descontroladamente. ¿De dónde viene y por qué decidiste titularla así?

Es curioso, el término “limerencia” tiene su origen en Inglaterra y describe ese estado emocional al que solemos caer cuando sufrimos una separación amorosa. Todo esto está controlado por la química cerebral, ya que el cerebro procesa la pérdida amorosa en la misma área donde se procesan las adicciones. Esto nos permite ver el amor como un fenómeno adictivo. Así, el bolero dispara ese “gatillo” emocional que nos hace desear algo con tanta intensidad.

¿Hay algún bolero en particular al que le tengas un cariño especial y que se vaya a reflejar en esta obra?

Sí, me gusta mucho “Hola, soledad”. Además, hay mucha producción de boleros en México. Aunque el bolero tiene su origen en Cuba, llegó a México a través de Yucatán y coincidió con el desarrollo de estaciones de radio como la XEW. La radio permitió la increíble expansión del bolero en esa época. Incluso, aunque el bolero no nació en México, aquí se establecieron todos los grandes exponentes. En México, el bolero se ha tropicalizado y regionalizado, adoptando estilos propios como el de Los Panchos.

¿Crees que esta puesta en escena podría atraer a jóvenes hacia este género musical, o es más bien una carta de amor para aquellos que crecieron con esta música?

Por defecto, es para la gente que creció con esta música, pero también pensamos en los jóvenes. Para eso incorporamos a Rojo Córdova, quien aporta un toque muy actual. La obra se desarrolla en tres planos ficcionales en escena: el no-lugar donde se encuentra el amor y la nostalgia, un salón de baile a la vieja usanza, y una cabina de radio. Aunque la radio ha cambiado con los podcasts, el concepto sigue siendo similar. Con estos tres espacios, Rojo Córdova invita a los jóvenes a conectarse desde el presente. La sorpresa ha sido que los jóvenes, aunque ven el bolero como música de “viejitos”, reconocen su valor cultural.

 ¿Hay algún otro elemento que quisieras mencionar sobre la obra?

Claro. El espacio de la cabina de radio lo ocupa Mima Madié, una amiga maravillosa con una voz divina, interpretando un par de boleros en vivo, junto al maestro Silvio Marino Asturiano. La columna vertebral de la obra es una selección de 18 boleros que considero representativos. Al final, hasta habrá música en vivo para que el público pueda bailar un par de boleros.

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Detalles

Dirección
Centro Nacional de las Artes
Tlalpan 79
Country Club
México, DF
04020
Esquina con
Río Churubusco
Transporte
Metro General Anaya
Precio
$150
Horas de apertura
Jue y vie 8pm, sáb 4 y 6pm, dom 6pm

Fechas y horas

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