Los preceptos e ideas sobre el amor recaían hasta hace unos años en el romanticismo. Hasta que nos dimos cuenta que ese romanticismo tenía que ser desarticulado, pero no desde los pequeños cambios, sino desde algo más estructural: cambiar las narrativas que nos han rodeado a lo largo de nuestras vidas. Es justo en este punto, donde se ancla el inicio de Calle Amor; una obra hecha con testimonios de un grupo de jóvenes egresados de la carrera de teatro (de la Escuela Nacional de Arte Teatral).
Calle amor trata sobre la disección de sus ideas románticas, y cómo estas, han permeado no sólo en la construcción de sus relaciones amorosas, sino también las laborales, así como la más importante de todas: su relación con el teatro.
Bajo la dramaturgia y dirección de Laura Uribe parte de una escena de la narrativa clásica de Señorita Julia, y desde ahí crea un recorrido meramente expositivo, que se convierte en una indagatoria de aquello que hemos hecho y permitido por amor; desde lo más placentero, hasta lo más abusivo y violento, porque en el amor como en el teatro, pareciera que entre más rotos y desgarrados estemos, mejor haremos nuestro trabajo.
¿Pero por qué seguimos contando las mismas historias? Esa es la indagatoria que pone sobre la mesa Calle Amor; la contradicción de "deconstruirse" en un mundo que necesita más compasión, pero en el que hay que salir a partirse el cuerpo y pagar la renta.
Durante más o menos 90 minutos los ex alumnos desentrañan el sistema que los educó y del que son parte. Entre películas de Disney, canciones de Belanova, y textos de Lope de Vega, este vertiginoso montaje se torna poderoso por lo que tiene que decir desde los más profundo de las tripas en uno de los escenarios más importantes para quienes hacemos teatro. Y esa, digámoslo así, es el acto más político que puede hacerse.
Calle Amor se presenta en el Teatro Julio Castillo del Centro Cultural del Bosque (detrás del Auditorio) y ha ido extendiendo temporada; ahora estará hasta el 12 de junio. Y es que, en definitiva, y salvo todo lo que se pueda decir de él, este es un acontecimiento escénico que por unas o por otras -y si eres un amante del teatro- debes presenciar y no te lo puedes perder.
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