Viriathus

Me atrevo a decir que el tiempo es la obsesión más grande de los humanos. Es algo intransferible que nunca podemos recuperar. Sin embargo, existen lugares que te transportan a otra era, uno de ellos es Viriathus.

Cruzar la puerta de esta tienda perdida en la Roma, es como atravesar un portal atemporal. Tanto el personal que atiende hasta la decoración misma, todo guarda un particular misterio que intriga desde el momento en que decides tocar el timbre. El lugar nació hace dos años. Lo fundó Viriato Cuenca con la idea de rescatar historias que se pueden volver a contar a través de un sinfín de objetos.

Esta tienda es, entonces, un semillero de recuerdos en espera de ser redescubiertos. El espacio está segmentado por habitaciones, cada una repleta de cosas como gabinetes de madera pura elaborados en la década de los veinte, pinturas originales que bien podrían pertenecer a la época romántica, una gran variedad de lámparas y candelabros, sillas, baúles y manuscritos de autores anónimos, fotografías antiguas e incluso, animales disecados.

Todos los artículos provienen de distintas colecciones que están a punto de ser desechadas. ¿Nuestro favorito? Un globo terráqueo que se puede ver desde la ventana que da a la calle. En este spot, que en realidad es un secreto citadino, encontrarás ediciones de grandes clásicos de la literatura, como Los Miserables. Los cinéfilos descubrirán, incluso, proyectores de 35 mm y cintas de películas antiguas.

Advertencia: debes tomar en cuenta que se trata de objetos rarísimos, por lo que los precios no son tan accesibles. Sin embargo, piénsalo como una inversión pues, más que un objeto, estás comprando una historia.