El Centro Histórico guarda invaluables tesoros en cada uno de sus rincones. Entre sus edificios coloniales, su oferta cultural, arquitectónica y gastronómica también encontramos tiendas con toda una historia que contar. Algunos de estos grandes locales que forman parte de la vida comercial del Centro han sobrevivido por más de un siglo en esta competitiva zona.
Tómate un fin de semana y recorre las calles de Centro mientras conoces estas tiendas. De seguro regresarás a casa con camisas, sombreros y dulces típicos.
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El paraíso de los dulceros de corazón. Cruzar la puerta de este lugar (fundado en 1874) es como traspasar un portal a otra época, una en la que los dulces nada tenían que ver con el pecado. Encontrarás turrones con almendras, dulce de cajeta, frutas deshidratadas, minibuñuelos de canela y todas aquellas delicias que te recordarán a tu infancia.
Desde su fundación en 1847, Sombreros Tardán se ha consolidado como una de las mejores tiendas de sombreros en la ciudad. Por sus puertas han pasado personajes como Porfirio Díaz y Emiliano Zapata. La pieza más vendida es el sombrero panamá (que por cierto es originario de Ecuador), aunque también encuentras un sinfín de modelos: de charro, texanos, boinas y gorras.
La Farmacia París es un tesoro del Centro Histórico. ¡Abre los 365 días del año! Desde su fundación en 1944, esta tienda que actualmente abarca siete locales en República el Salvador surte a sus clientes con medicamentos, suplementos alimenticios, instrumentos quirúrgicos, perfumes y productos dermatológicos.
La camisería más longeva del Centro y de la ciudad empezó a funcionar en 1898 en el Pasaje Iturbide, muy cerca de Madero y a un lado de la zapatería El Borceguí. Desde entonces se distingue por su atención personalizada, la cual lejos de decaer con el paso del tiempo, mejora día con día. Su vitrina con calcetines, pijamas, bastones, paraguas, chamarras y demás supone sólo una pequeña parte de la experiencia.
A finales del siglo XIX un hacendado de Zacatecas llegó a la CDMX con la idea de abrir una talabartería para jinetes. Su sueño se materializó en un almacén que lleva por nombre La Palestina. El edificio original data de 1884, pero fue reconstruido en 1903 ydesde entonces se ha convertido en un referente de marroquinería y artículos de charrería.
5 de Mayo 20, Centro. Lun-sáb 10am-7pm, dom 11am-4pm.
Más de 150 años respaldan a esta tradicional zapatería. Fundada por la familia Chacón, la tienda fue adquirida en 1900 por el empresario español Lucas Lizaur. Poco a poco se ganó el respeto de los vecinos porque hacía zapatos a la medida y calzado para pie plano. Tal es su prestigio que en 1991 se estableció en este mismo lugar el Museo del Calzado que cuenta con más de dos mil zapatos.
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