De la barbacoa a las flautas, pasando por los tacos de cecina y las baguettes, este mercado es el favorito de los vecinos y trabajadores de la zona para comer y desayunar. Su nombre nada tiene que ver con la canción de Cri-Crí, pero se dice que el singular apodo surgió en plena construcción del mercado en 1955, cuando un trabajador rompió una tubería y un chorrito de agua salió y salió durante varios días. Aunque, hay otra versión que le atribuye el nombre a una pequeña fuente de agua, justo en la esquina de Gobernador Melchor Muzquiz y Parque Lira.
Entre los imperdibles del mercado destaca la mercería especializada en botones comandada por el señor Cuahtémoc Lozano (hay más de 800 modelos acomodados en frascos gerber), la carpintería y la amplia zona de cafeterías y de comida corrida.
El mercado —también llamado Plutarco Elías Calles— celebra su cumpleaños el 15 de octubre, los locatarios (alrededor de 360) consienten a sus clientes con regalos y utensilios para el hogar.
Para comer, procura llegar antes de las tres de la tarde. Tómate tu tiempo y elige entre las diferentes opiones de antojitos (con las enchiladas, flautas y tacos de barbacoa no hay falla). Si tienes una dieta restringida, dirígete a las cafeterías pide una ensalada o algún snack saludable.
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