—¿Estoy entrando a una tienda o a una casa?— fue el primer pensamiento que tuve tan pronto terminé de subir las escaleras en Jalapa 121, Roma. La verdad es que Escalina es una tienda con una curaduría bellísima y se siente tan hogareño porque está pensado para dar esa ilusión para ayudar a saber cómo es que los objetos lucirían en tu espacio, el experticia en diseño de interiores con el que cuentan las fundadoras Sabina Santana y Erika Krützfeldt, pues es palpable en cada detalle.
Al no tener estantes tradicionales debes prestar mucha atención, porque sus muebles, ropa, accesorios y objetos se encuentran en cada rincón. Todo me encantó, todo es elaborado por artesanos y diseñadores. Sobre la mesa del comedor se encuentra una vajilla con motivos cotidianos del lago, está creada en barro blanco elaborada en Tzintzuntzan, Michoacán. Al alzar un poco la mirada me encontré con aves elaboradas en madera originarias de Zipolite, Oaxaca, de ellas cuelga un detalle de henequén proveniente de Yucatán, sin duda una gran artesanía para tu hogar.
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La propuesta se crea y va nutriendo de los objetos recolectados en viajes, dentro de México y América Latina, que han realizado Sabrina y Erika. Escalina surge a partir del gusto y la admiración por el diseño, tal como nos comenta Erika, "Empezó como un bazar que hacía en mi casa, a la gente le gustó sobre todo porque nos enfocabamos en comprar cosas artesanales, procesos nobles y de bajo impacto, posteriormente surgió la oportunidad de abrir este espacio".
El espacio abierto a finales del año pasado es un gran spot para los extranjeros que buscan un recuerdo único y especial de México y América Latina. Los precios van a partir de los $300 aproximadamente, para joyería $1,000. Ojo, para encontrarlos debes subir las escaleras de la casa.