La fiebre por lo vintage parece no tener fin. Si bien es cierto que vivimos en una era dominada por la industria del fast fashion, siempre nos llena de felicidad encontrar espacios que se preocupan por darle una segunda oportunidad a la ropa. Así nos pasó cuando descubrimos Erre Vintage en una pequeña calle de la Zona Rosa.
La historia de esta tienda se gestó hace cuatro años, cuando Richie Lodela —dueño de ERRE Vintage —, se dio cuenta de todo el desperdicio que existe en el consumo de ropa, tan solo en México caen en desuso 270 toneladas de ropa al año. Razón suficiente para que iniciara este proyecto. ERRE es una marca que recicla, reutiliza, renueva y revive prendas que tienen toda una historia detrás y que pueden rescatarse para una segunda vida.
Después de distribuir sus piezas en lugares como Casa Caballería, Vintage HOE y Caarmela, Richie consiguió un local propio —en un imponente edificio art déco— donde apenas hace un mes abrió su propia tienda vintage.
A primera vista parecería que ERRE maneja únicamente ropa masculina, sin embargo, Richie afirma que todo es unisex, “el chiste es que te sientas cómodo y encuentres una prenda que te complemente”, comenta. ERRE es para todos los bolsillos, no necesitas gastarte miles de pesos para conseguir una auténtica reliquia, al contrario, aquí encuentras accesorios desde $120 pesos, playeras en $180 o chamarras desde $350. Claro que hay artículos más costosos, en nuestra visita vimos un maletín Gucci en perfecto estado, t-shirts de bandas de rock, bikers de cuero, pantalones Versace y abrigos de Burberry, que pueden llegar hasta los $8,000 pesos.
ERRE también comparte espacio con 11:59, una propuesta creada por Mónica, Michelle, Karla y David, cuatro diseñadores amantes de la moda vintage. Su oferta se compone de prendas sencillas y minimalistas, pero también hay espacio para camisetas con estampados de los años sesenta, prendas de la época de la Segunda Guerra Mundial y hasta piezas icónicas que te harán recordar tu infancia como una chamarra con el logo de Divertido, el parque de diversiones noventero. Los precios van de los $200 a los $2,500 pesos.
A pesar de que ambas propuestas tienen diferentes conceptos de prendas, logran una excelente fusión que te hará regresar más de una vez para descubrir más joyas retro. Cada semana llegan nuevas piezas, todas ellas muy bien curadas y seleccionadas por sus respectivos dueños. En cuanto puedas, haz una parada por su local y sorpréndete.