Orozco, Revueltas, Barragán y Camarena regresan en forma de lentes. No es broma, hablamos de Ben & Frank, una de las ópticas que está haciendo ruido en la CDMX porque es un proyecto que dio el gran saltó del e-commerce a tienda física. La primera óptica se encuentra en Polanco y la segunda acaba de abrir en San Ángel.
Dentro del Mercado del Carmen, Ben & Frank ofrece lentes ópticos y del sol por solo $1,800, no importar la graduación que necesites, el precio es el mismo. El costo aumenta si requieres polarizado graduado, entonces tendrás que pagar $2,500.
Al igual que la sucursal hermana en Polanco, este espacio es acogedor: hay luces tenues, paredes adornadas con espejos de perfectamente redondos y muebles de madera que exhiben toda la oferta de lentes. Cada armazón tiene nombre propio, así como estilo y color, hay formas redondas, intermediadas y cuadradas.
Si es la primera vez que usas lentes, te encantará el servicio de consultas optométricas para saber la graduación qué necesitas, así como servicio de reparación en caso de que tus lentes necesiten algún arreglo. La consulta cuesta $150 y si al final te animas a comprar tus lentes se te reembolsará esta cantidad.
Una gran ventaja es que si no tienes tiempo de ir a cualquiera de sus sucursales ( tamabién hay una pequeña esquina en Camino), tienen un sistema de prueba en tu casa, el cual eliges cuatro armazones y te los mandan hasta tu casa para que te lo pruebes con toda la calma del mundo.
No te vayas de la tienda sin antes pasar a mesa de souvenirs (aquí les dicen porquerías cuatroojos), hay tazas, lápices en $15, libretas en $70, stickers en $30 y pines inspirados en los modelos de B&F.