¿Tus joyas son un verdadero desastre? ¿Nunca sabes cómo acomodarlas y siempre terminan enredadas? En esta ocasión Revista Moi te da tres opciones para poner en orden todos tus accesorios sin morir en el intento.
Checa las propuestas de joyería mexicana, ya sea que busques piezas de oro, plata y demás materias primas, aquí encontrarás la ideal.
-1 marco para fotos.
-1 cartón del tamaño de la foto del marco.
-1 pistola de silicón.
-Corchos de varios diseños.
Pega los corchos sobre el cartón de la forma que más te guste, de manera que queden pegados sobre el costado. Entre más original y padre sea el patrón que les des, más lindo se verá.
También pega hasta abajo unos corchos de forma vertical, así podrás poner tus collares colgados en esta parte, y en la de arriba encajar tus aretes.
Puedes hacer dos o los que necesites, y colgarlos juntos para que formen parte de la decoración de tu casa, además de funcionarte como joyeros.
- 1 marco lo más vintage que encuentres (Lagunilla, Mercado de Jamaica, La Raza).
-1 malla metálica tipo mosquitero del tamaño de tu marco.
-1 pegamento especial para metal.
-8 papelitos recortados (opalina funciona bien porque es más gruesa).
Coloca el pegamento especial en la parte de atrás del marco y pega la malla metálica.
Para poder aplastarlo bien y que no te pegues todo, ayúdate con los pedazos de papel. Presiona durante unos minutos hasta que veas que pegó por completo. Deja los papelitos, de todos modos no se van a ver.
Ahora cuelga el marco en donde quieras y comienza a poner tus aretes en pares. Nunca más se te perderán de vista, y sabrás exactamente cuáles tienes para lucirlos todo el tiempo. ¡Además de que el marco se ve divino!
-1 rallador de queso vertical.
-1 lata de pintura en aerosol color blanco mate.
-1 pegamento especial para metales.
-4 armellas.
Toma en cuenta que el rallador va a ir parado por lo que tiene que sostenerse por sí mismo y de preferencia ser de forma vertical.
Este es el pegamento que te servirá para pegar las armellas en cada una de las esquinas de la base del rallador.
Ahora sólo queda pintarlo color blanco mate (o el color que más te guste y vaya con tu espacio) y listo. Puedes darle más de una capa para que te quede súper bien hecho.
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