Publicidad
Esquites en la CDMX
Estos esquites, por estar asados, tienen un sabor al mismo tiempo ahumado y picante. A la hora de servirlos (no en vasito, sino en un plato camotero), les agregan un toque final: mantequilla.
Otro ingrediente estrella es la salsa con chamoy. El resultado ha sido un éxito absoluto no sólo entre los oficinistas de alrededor, sino en toda la ciudad. Un detalle: no son muy amables que digamos, quizás la fama ha comenzado a afectar en la calidad de atención.
Los esquites de Mr. Corn son de grano pequeño y su juguito es abundante en limón, lo que le da una acidez que se disfruta. También tienen diferentes salsas de mayonesa, de chipotle y de varios chiles. Puntos extra por tener la opción de crema. Aseguran que son el primer food truck que hubo en la CDMX y tienen algunos argumentos que podrían comprobarlo. Es una receta que ha perdurado a lo largo de los años y sobre todo, que son ahora una flotilla de vochos que pulula por las calles del sur y poniente de la ciudad. Consulta su página web para que ubiques sus movimientos.
Publicidad
Se encuentran en una zona poco explorada pero llena de lugares para merendar, este negocio ofrece los que quizás sean los esquites más osados de la ciudad. Se sirven en jarrita de barro y en combinaciones con chile cuaresmeño, champiñones, chorizo, frijoles de la olla, bistec o chicharrón. La Esquitería ha comenzado el salto evolutivo de los esquites. Por si fuera poco, sus otros platillos (haz espacio para su pay de elote) son igual de buenos. Tip: hacen catering para eventos y tienen opciones veganas.
A estas alturas, se puede decir muy poco sobre estos esquites ya clásicos en la esquina de Eje Central y Xola.
Las filas para comprar sus delicias son tan legendarias como su receta y su fama no es para menos. La combinación de epazote, caldo de pollo o tuétano hace a estos esquites además de deliciosos, muy reponedores. Son el antojito más cercano a la sopa o al pozole.
Si quieres con pollo ven los lunes, miércoles, viernes y domingo; para probar los de tuétano los martes, jueves y sábado. Vale la pena llegar temprano o si de plano no quieres hacer fila, confórmate con un elote.
Publicidad
En la esquina de Cuauhtémoc y Allende en pleno centro de Coyoacán, en 1967 (año en el que se cumplía el centenario de la derrota del imperio de Maximiliano), don Benito Juárez Sevilla colocó su negocio de elotes y esquites.
Desde entonces, su fama se ha mantenido hasta ser parte del paisaje coyoacanense. Aquí usan granos grandes y pequeños y como un gran detalle, epazote finamente picado que da un sabor ahumado muy agradable.
Tip: pide tus esquites mitad hervidos, mitad asados.
También te puede gustar
También te puede gustar
Discover Time Out original video
Publicidad