Según la definición, Romina es una ragazza sensible, sincera y directa. Aplica muy bien para esta pequeña y moderna trattoria, de precios como en la Condesa, pero en la zona habitacional de Polanco.
Con los carteles en blanco y negro de la bellísima Sofía Loren, comiendo y cocinando (uno de sus íntimos placeres), de inmediato te transportas a una época de oro de la cultura italiana, cuya cocina siempre ha estado presente, precisamente, por su sencilla exuberancia.
Si hace calor, inicia con una ensalada, como la de arugula con tomate deshidratado, fresca y abundante. Luego, una ligerita y perfecta saltimbocca alla romana, ternera suave con jamón en mantequilla y salvia fresca.
Para la merienda, y estás de apetito, escoge una de las típicas pastas o risottos, preparados con los mejores ingredientes. De postre hay tiramisú, panacota, chocolate en mousse, pero combínalo con grappa (ocho diferentes, de muy delicado sabor), y finaliza con un preciso expreso ristretto.
Hay cata y maridaje el segundo miércoles del mes a las 8pm y por sólo 650 pesos. Buona sera!