Si la canción que lleva en el coro: “If you like piña colada?” fuera un lugar en la Ciudad de México, ¿cómo te lo imaginas? Seguro sería algo muy parecido a Palapa Cantina.
Fui a conocer la nueva cantina que rinde homenaje a la coctelería y gastronomía de todos los países del Caribe. Dar con esta palapa -literalmente es como una enorme palapa- puede ser enredoso porque no se ve desde la calle. Junto a una puerta de hierro sobre Versalles hay una plaquita con el nombre; entra y dirígete al final del pasillo hasta que distingas el techo de paja. Al son de “pasito tun tun”, entra y acomódate. El espacio es abierto, con mucha madera, lámparas de mimbre y rodeado por completo de palmas tropicales. Aquí sí puedes entrar en huaraches, ya que solo falta la humedad y el mar turquesa para sentirte en la playa.
Para entrar en calor, un traguito. Me fui por el Fresco, que lleva Chivas Regal 12, cordial Fresco (té de limón, miel y semillas de cilantro), Angostura bitter y soda. Un coctel alcoholoso y adecuado si te empalagas fácilmente. Obviamente, el ron cubano tenía que hacer una gran presencia en la carta y lo encuentras en clásicos como mojito, daiquirí, presidente y en creaciones de la casa como el Carretillero (con Ron Havana Club, Carpano dry, verjus rojo, agua de azahar y almíbar de miel). El emoji de fueguito hecho coctel.
El chef colombiano Sebastián Pinzón es quien estructuró un menú de alimentos que reúne sabores típicos desde Yucatán hasta Colombia, pero que también da lugar a las influencias que conforman la identidad de islas como Jamaica o Martinica. Aquí todo se sirve al centro para picotear y compartir. Las mezclas tropicales y agridulces comienzan a envolverte desde las entradas: el ceviche con leche de coco, ají dulce, aguacate tatemado y jícama y cebolla encurtidas es un buen primer acercamiento a su sazón.
Las raíces árabes que permean el Caribe la encuentras, por ejemplo, en el Kibbeh Nayyeh, una entrada de carne cruda de res con trigo sazonada con especias, cebolla, rábanos encurtidos, hierbabuena y almendras tostadas, la cual empareja perfectamente a un sedoso hummus. El chef cuenta que, directo de las calles de Trinidad y Tobago, quiso recrear el doubles, que es un curry de garbanzo sobre un flat bread crujiente. Algo que seguro no habías probado en otro lado.
Si todo lo anterior te hace dudar, en los platos fuertes es donde la tuve difícil para elegir mi favorito. Al final, sin duda la lengua en salsa caribeña y arroz con coco es el que me hará regresar; aunque el pollo orgánico Jerk Style le pisa los talones.
¿Crees que ya acabaste? De aquí no sales sin echar una partida de dominó como toda cantina caribeña. ¡Ya tú sabe!
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