Un clásico de clásicos, en cuanto a comida oriental se refiere. El Masao es bien conocido por los vecinos de la gente de la Nueva Santa María porque, a pesar de que el sitio no demuestra ningún tipo de lujo, su carta de comida sí lo es.
El menú es muy amplio y, si no vas en horas pico de comida, las comandas humean sobre las parrillas de metal y salen calientes muy rápido. Tiene ensaladas con fideos chinos, verduras salteadas en wok y calamares; sopa de alga wakame, con tamago, o huevo, y con arroz, pollo y vegetales. Hay un apartado especial con fideos caldosos, yakimeshis, brochetas asadas caramelizadas y más de 10 guisados con arroz: lo mismo con camarones, res y filete de pescado.
Ofrecen makis vegetarianos, fritos y empanizados con hueva de pescado o queso crema; sushis con anguila de río, macarela y salmón fresco y, para tomar, cervezas japonesas y nacionales, calpis, sangrías preparadas y copas de vino tinto o blanco.
Hablando de porciones, tienes que saber que no son tan generosas como en otros lugares a los que estamos acostumbrados. Pero lo que te llega al plato es suficiente para que comas bien y te vayas sin hambre.