En este local solía encontrarse La Memela Nuclear, pero tras una escisión familiar, apareció un negocio de nombre parecido y una personalidad disntina sin alejarse mucho del concepto original.
Su variedad es extensa y se atreven a crear memelas nunca antes vistas, como las vegetarianas con champiñones y nopales; la gourmet con arrachera o la memelita para niños, con jamón de pierna.
En el menú se encuentra la majestuosa memela suprema, con 250 gramos de quesillo y bistec planchuela. Ojo: este portento de la gastronomía de la Ciudad de México no es para principiantes.
También preparan las extrañas amarillas, son quesadillas con queso amarillo y rajas de chile jalapeño. Su sabor se acerca a los nachos del cine, pero aún mejor.
Aunque La Memela del Núcleo ha sido un poco irregular en sus horarios, siempre cumple con los martes de chilaquiles verdes, picositos y acompañados de costilla o huevo. No será difícil hacer de este lugar un favorito para después de una noche de fiesta o simplemente para disfrutar de un antojito delicioso.