Este bistró tiene a su favor que la casona que lo acoge tiene un precioso diseño art decó; desde que puse un pie dentro me intrigó conocer sus recovecos. “Casi no tocamos nada de la casa”, me cuenta Michelle Díaz Anderson, quien está detrás de Husman, un proyecto que comenzó como café en Casa Basalta antes de mudarse a la Juárez.
Michelle es mitad sueca, mitad mexicana. Su familia tiene una marca de muebles, y encontraron la casa para un showroom, pero pronto vieron el potencial que tenía para volverlo un punto de reunión entre vino y buena comida.
Al entrar, del lado derecho hay unas cuantas mesas con una decoración, justamente, muy europea. Del lado izquierdo, la barra es grande, sin embargo te permite platicar en confianza con tu acompañante o con la gente que llegue a tomar un coctel de la buena mano de Xchel Montoya (Sinónimo). Si no has probado sus tragos, aquí es el lugar, pues su estilo de mixología va desde tragos delicados hasta unos muy arriesgados, además de que ver su preparación es un espectáculo. Probé un martini con plátano y hoja shizu que en el primer trago no supe si podría con él y luego no quería soltar de mi mano.
La selección de vinos naturales es igualmente importante. Un tip es que si solo quieres una copa y alguna entrada, sube las escaleras, pasa por el segundo piso que es una galería y llega a la terraza; en este espacio hay una segunda barra, sillones cómodos y está rodeada de plantas para echar a gusto el chisme.
De vuelta al primer piso, Michelle me cuenta que le han puesto mucha atención a cada detalle para que te sientas como en casa. Se ve claramente en la calidad de la comida, creada en colaboración con Jovany Alberto Castañeda (Martínez, Rosetta) bajo un concepto tipo comfort food europea, bien hecha pero relajada. Aquí es donde quiso impulsar su herencia sueca con platos como la papa rotti (como un bastón de láminas de papa frita) que se acompaña de ikura, una porción de crema ácida y cebollín; también hay albóndigas suecas o mejillones a la marinier. Pero si quieres algo mucho más sustancioso, la imperdible es la hamburguesa de rib eye y mermelada de tocino. Todavía soñamos con la jugosidad.
Tip: Los jueves cada 15 días hay jazz en vivo a las 9:30 pm.