Durante nuestra visita, esta panadería/sandwichería destacó por su servicio rápido y conocedor de las propuestas de la carta, gran surtido de pan y su menú variado de sándwiches, ensaladas y bebidas. Una excelente opción en la zona cuando llevas prisa y quieres comer algo que sea saludable sin caer en la tentación de la comida rápida, o bien, sacrificar tu tiempo y bolsillo en un restaurante.
Ya sea que vayas de prisa, o no, este concepto deli americano te recibe con sus productos panaderos en varias repisas; hay desde conchas hasta pay de cereza, o en época, hay pan de muerto y rosca de reyes.
Tienen una barra refrigeradora en la que puedes ver todos los ingredientes con los que puedes armar un sándwich a la medida de tu boca, también hay opciones pre armadas y puedes jugar con ellas. Por ejemplo: pedimos un sándwich Washington, que es un cuernito relleno de jamón de pavo, queso amarillo, aderezo, lechuga, pepinillos, jitomate y cebolla. En lugar del cuernito lo pedimos con pan hoggie de parmesano y fue excelente. El pan, que hornean ahí mismo, estaba esponjado y la costra de parmesano muy dorada, además, todos los ingredientes del relleno estaban frescos y hasta nos ofrecieron rodajas de jalapeños.
Para acompañar a cualquiera de las más de cinco opciones de sándwiches, hay una extensa lista de opciones para beber, como café recién hecho, frappés, aguas y jugos. Te recomendamos el agua de horchata, una de las mejores opciones de este deli; el agua te la sirven muy fría y es densa por el arroz y endulzada justo al punto necesario para quitar la sed.
Tip: si quieres un café que te despierte y tenga un toque diferente, pide un espresso city bakery, tiene leche condensada y espuma de leche.