Platicamos con Marcela Briz, miembro de la familia fundadora del restaurante El Cardenal, y nos recomendó cinco mercados para vivir la cocina mexicana.
Hace 10 años, Marcela Briz, miembro de la familia fundadora del épico restaurante El Cardenal, vivió con alegría el nombramiento y reconocimiento de la cocina mexicana como Patrimonio Intangible de la Humanidad por parte de la UNESCO. Además, ese acontecimiento fue la culminación de un largo camino que se había iniciado desde principios de este siglo, cuando, en 2004, se presentó la primera propuesta ante la UNESCO en una sesión en París.
Para Marcela todos los rincones de nuestro país, pero, sobre todo, nuestros mercados, son algo profundamente representativo de nuestra cocina. Marcela nos mencionó cinco mercados en donde ella considera que podemos encontrar los productos que siempre están recordándonos nuestra identidad, nuestros orígenes y, en sus palabras, “la maravillosa e inagotable gastronomía mexicana.”
Además de tu canasta básica, en el Mercado de Coyoacán encontrarás antojitos y fonditas maravillosas, una oferta enorme de jugos y licuados con frutas frescas y de temporada, carnitas, quesadillas, y las famosísimas tostadas, que tienen desde tinga de pollo hasta pulpo y pescado. También hay puestos de pescados y mariscos, fonditas que procuran el toque casero auténtico y, para rematar, dulces típicos.
Ignacio Allende s/n, Del Carmen. Lun-dom 8:30-6:30pm
Este mercado es conocido por su oferta gourmet nice: desde tapas y vino tinto hasta cortes de búfalo y jabalí. Pero aquí también encontramos Triana, un cafecito que vende bebidas con el grano que traen desde Coatepec, Veracruz; además de fonditas caseras y, ¡bendito Dios!, puestos en donde venden insectos fresquitos y de gran calidad: chapulines, escamoles, gusanos de maguey y hasta alacranes –que, sí, son parte de la vasta cultura alimentaria mexicana-.
Ernesto Pugibet 21, Centro. Lun-dom 9-6pm
En este mercado, cuyo nombre oficial es Melchor Múzquiz, lo mero bueno son las frutas y las tostadas: que si de camarón, de tinga, de pata o de cochinita, todas son garantía. Otra de las joyas del mercado —y privilegio que tenemos los mexicanos— es la fruta picada. ¡Qué no darían los europeos por la dicha de tener mango con chilito y limón en un vaso! Pues ahí hay harta fruta, y toda de temporada. Pásate también por el puesto de chiles secos y cómprate un mole en pasta, o mejor, anímate a hacerlo tú, seguro los marchantes te pasarán alguna receta con gusto.
Av. Revolución s/n, San Ángel. Lun-dom 7am-7pm
Aquí puedes encontrar desde carne seca del norte hasta quesillo de Oaxaca. Entre tus compras tienes que parar para echarte un taco de cecina, bistec, nana, hígado o machitos. También hay comida oaxaqueña, ya sea para que te sientes a comer ahí o para que te lleves a tu casa todos los insumos necesarios para armarte el festín.
Calzada Santa Cruz s/n, San Simón. Lun-dom 8-6pm
Para Marcela, la identidad de la cocina de la ciudad está en los alrededores de la misma, en las zonas rurales y semi rurales. Reservorio de estas expresiones culinarias es el Mercado de Xochimilco. Ahí los productores todavía venden productos de sus milpas o antojitos preparados con lo que ellos mismos cultivan: chapulines, acociles, tamales de charales, empanadas, moles, quesadillas, garnachas hechas con maíz cultivado y nixtamalizado por las mismas manos que te las venden y, por supuesto, michas gritas y verduras que provienen de los excedentes de los productores.
Av. Nuevo León s/n, Santa Crucita. Lun-dom 8am-8pm
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