En pleno Polanquito, el fulgor de unas letras luminosas me hizo subir unas escaleras de caracol hasta llegar a Centralito, el restaurante-bar hermano de Central Central (Santa Fe).
Te impactará su cava de vinos, es lo primero que te recibe. Si te toca sentarte en la terraza tal vez lo que te deslumbre sea el muro tapizado de botellas de licor, desde tequila, ron hasta mezcal, todas las opciones que te imagines te hacen ojitos desde los anaqueles. La decoración tiene detalles vintage, y pantallas gigantes, que son ideales para disfrutar de partidos de futbol (me tocó ver la Champions League) o cualquier evento deportivo.
Lo primero que me ofreció el mesero fue una cerveza para recibirme y abrir el apetito. Pedí una oscura y la carta, que es amplia y variada, tienen un apartado importante de tapas y motnxis, pero la estrella son los mariscos. Hasta tienen una barra especial con la pesca del día.
De entrada, opte por una orden de tostadas de pulpo, son pequeñas pero nutridas, con un pulpo muy suave acompañado de pepino, cebolla morada y un pedazo de aguacate. Cumplidor, pero nada que hiciera revolotear mi paladar.
De plato fuerte me fui con la recomendación del chef: un pozole de mariscos. Este sí provocó fuegos pirotécnicos en mi ser. La salsa, hecha de una mezcla de chiles guajillo, ancho y puria, tenía el sazón ideal para bañar el pulpo, las almejas y los camarones que nadaban con los granos de maíz, pequeños pero suaves y de buena consistencia. Este experimento se llevó mis aplausos.
De su carta de cocteles saltan a la vista los hechos con champagne, (ojo, los lunes tienen oferta de 2x1), los tradicionales y unos de mezcal. Pedí un pasión bendita, de mezcal y maracuyá, muy fresco y con un toque de chile piquín.
Me faltaba algo dulce, y el fiel mesero me dio la recomendación del día: unos buñuelos de manzana rebozada espolvoreados de canela. Venían con helado de vainilla y frambuesa y la piel de la manzana estaba crujiente, azucarada y con un toquecito de miel.
Cabe mencionar que el servicio es impecable, un ejército de meseros está a tu disposición y revisan todo el tiempo que tu experiencia sea óptima (hasta me llevaron un babero para que no llenara de guajillo mi camisa). Toma en cuenta que los precios no son accesibles, pero la relación costo- beneficio tiene balanza positiva.
Si quieres que la comida termine en fiesta, los miércoles, jueves, viernes y sábados son noches de djs con música los setenta, ochenta y noventas.