La nueva sucursal en Palmas pertenece al mismo grupo que los restaurantes Bonito Pop Food de la Condesa y San Ángel, pero es harina de otro costal pues su menú está a cargo del australiano Paul Bentley (Magno y Bovine Brasserie). Se centra en su extraordinaria charcutería madurada ahí mismo, así como en las pastas artesanales orecchiette con salchicha de cordero y pasta negra con estofado de pulpo. También hay gravlax curado en casa, carnes a la leña como el impecable lechón y el conejo cacciatore, y los clásicos tiramisú y galette de manzana verde para el postre.
Pocas cosas se prestan tan bien como la charcutería a que un chef deje su huella, aunque no esté presente en el local todos los días: la maestría con que Bentley mezcla carnes, grasa y especias y sabe cuándo servir cada embutido es una gozada. Sin duda vale la pena pedir el surtido de cinco, y que no falten el saucisson sec, la untuosa rillette de cerdo ni el pâté en croûte con su hojaldre bien crujiente, relleno con pistaches y trocitos de carne más tiernos y otros más resistentes a la mordida.
Además, el local espacioso y bien iluminado no se siente apretado aunque haya mucha gente, y es buena opción para el fin de semana ya que cuentan con un espacio infantil contiguo ($100 por niño).