Llegué a Alma Pura buscando un buen desayuno y, para ir al grano, lo encontré. La pureza de su alma en realidad me tiene sin cuidado: lo que más me importa es el sabor. Por eso estás leyendo la reseña de este bar de jugos y cafetería, porque sus jugos, licuados y platillos son ricos y frescos, las porciones generosas, los precios moderados y el servicio cordial. Así que incluso, los que nos sentimos un poquitín incómodos con ese sentimiento de superioridad moral que se deriva en ciertas personas por una alimentación sanísima, una vida dedicada al ejercicio y una actitud eternamente optimista expresada en memes con fotos de atardeceres en la playa, podemos comer muy bien y pasarla a gusto.
Entre su gran variedad de jugos, shots y smoothies preparados con fruta y verdura fresca y un elenco de superalimentos, escogí un bacalar, de leche de coco con mango, polen y cúrcuma. No estaba tan espeso como se supone que son los smoothies, más bien se sentía ligero y refrescante, en especial porque no le ponen azúcar ni endulzantes. La idea es que tú agregues jarabe de agave al gusto, pero no me hizo falta.
De comer, primero pensé en pedir unos hot cakes veganos con frutos rojos que vi en una mesa vecina, pero al final me decidí por un resplandor (de seguro inspirado en Kubrick), que son huevos estrellados, horneados sobre portobellos gratinados con salsa de cacahuate. Uno de los huevos estaba muy cocido y pegado al fondo de la cazuelita de hierro fundido en la que los cocinan y los sirven, pero por suerte el otro había quedado suficientemente tierno, y los carnosos hongos y el queso le iban muy bien. Para chopear la salsa, que tenía un picor moderado y el sabroso espesor de los cacahuates, me trajeron una rebanada de pan campesino recién tostado, tan bueno que tuve que preguntar por su origen ,Sucre i Cacao, mientras a mi alrededor seguían llegando parejas solas, con niños o con perros, gente que va a leer o a trabajar un rato, grupos de amigos y corredores que pasan por un jugo y siguen al trote.
Aunque el enfoque de Alma Pura está en ofrecer opciones veganas y vegetarianas, y en la salud y los beneficios nutricionales de sus alimentos, lo que acaba de convencernos a los comensales omnívoros es, como siempre, la sabrosura, y también en eso salen muy bien calificados. Dan ganas de decirles que sigan así y nunca cambien. En serio.