Lo que antes era un despacho de arquitectos se convirtió en un espacio de coworking en el corazón de la CDMX, esto bajo la idea de que una oficina debe compartirse para dar oportunidad de crecimiento y networking a todo tipo de proyectos.
Aunque el acceso es difícil, vale la pena conocer este lugar. Su moderno y amplio espacio se mezcla con acabados de madera y muebles vintage. Cuenta con seis oficinas fijas, 20 espacios individuales de coworking, una sala de juntas y tres salas de estar (dos de ellas equipadas con televisores inteligentes y una con gradas para reuniones). Además, posee un área de descanso con talud lúdico, perfecto para ver el futbol, echarse una siesta o simplemente platicar.
Para Mónica Romero, una de las fundadoras de Sona Centro, lo importante es crear un ambiente de convivencia y adaptarse a las necesidades de cada uno de los freelancers y startups que contratan sus servicios. Es así que recientemente crearon una instalación diseñada para captación de agua ya que una de las empresas así lo solicitó.
Todos sus paquetes incluyen servicios básicos como WIFI, agua, café y acceso a las áreas comunes. Los planes van desde Turista, que es individual y sólo por 15 días, hasta el de Local y Oficina, los cuales son mensuales y cuentan con mensajería en bici, entre otros servicios. Actualmente no existe una tarifa por horas, sin embargo, pronto será implementada esta modalidad.
Otra de las cualidades de Sona Centro es su terraza de 360° que te permite observar todo el Valle de México y que es parte de su espacio diseñado para eventos con una capacidad de hasta 300 personas. Lo mejor de este coworking es que es 100% pet friendly, puedes llevar a tu mascota (no importa su tamaño) y trabajar todo el día junto a ella.