Malvestida lanza su primera anti-guía de la mano de expertas para darnos esos consejos necesarios de la vida. Platicamos con Alejandra Higareda, autora y directora del proyecto sobre “Existir suavecito”.
Existir suavecito, sin más. Un libro lleno de ejercicios, reflexiones, entrevistas e ilustraciones para poner en perspectiva cómo y de qué manera reaccionamos ante el amor, el síndrome del impostor e incluso al fantasma de la dismorfia corporal.
Ale Higareda encabeza el equipo de Malvestida, un medio de comunicación enfocado en mujeres y diversidad. Hecha precisamente por ellxs y se acompaña de Paola Alín y Alexandra Verdugo para ayudarnos, como solo ellas saben, a resolver khépedo con la vida.
¿Cómo nace la idea de “Existir suavecito”?
Malvestida es esta plataforma donde se unen las voces, donde se comparten ideas y donde nos acompañamos en colectivo. Algo interesante es que el libro se llama así por una casualidad. Fuimos creando el libro con ejes que queríamos abordar poco a poco. Todo en estas páginas es muy de acompañamiento, de lo que queremos compartir siempre.
Nuestro compromiso es seguir aprendiendo y entender que es un proceso que no termina. Somos un proyecto que no para de evolucionar. Queremos que sea un espacio de ideas y apapacho, siempre pensando en el diálogo, de que cada quien puede ser como quiere ser, un espacio que celebra la creatividad y la diversidad.
Desde el arte y las voces, nos divertimos mucho haciéndolo porque en la alegría y la colectividad hay resistencia. Es una anti-guía para lidiar con muchas cosas del día a día, para analizarnos a nosotres, porque eso somos todas.
¿Qué mensaje esperan deje “Existir suavecito” a las personas?
Que entiendan que pueden cuestionarse es un ejercicio para toda la vida. No es como que un día te deconstruyes y ya, siempre hay algo nuevo que sirve para reinventar el mundo como lo concibes. Este libro busca ser esa compañía que te recuerda, tocar base contigo y cómo ha cambiado la forma que ves ciertos temas.
Que sea esa compañía para los procesos solitarios o confusos, ya que de eso se trata la vida. De confrontarse y darse amor. Nos gusta mucho el resultado, pues como dice una frase en el libro, “lo importante en la vida son las preguntas más que las respuestas” y pensamos que eso va cambiando según las etapas de la vida. Siempre cuestionarse: es el mensaje.
¿Por qué es relevante tener una anti-guía que nos apoye en estos tiempos?
Pienso que publicar un libro hoy es apostarle a frenar la inmediatez, para permitirnos romper esa inercia tan arraigada de lo digital. Queríamos algo que pudieras desmenuzar lento, sin orden, haciendo ejercicios… queríamos que fuese cercano a las personas, pero que nos hiciera “salir a tocar pasto” para recordar que el mundo nos permite usar todos los sentidos, convivir con otres, escuchar al otre. Trasladamos esta energía y magia visual del proyecto digital al libro.
Es un libro para pensar y hacer mucho trabajo interno. ¿Cómo construyen los ejercicios de “Existir suavecito”?
Diana y Alexandra tradujeron lo que Pao y yo nos pusimos a escribir y ellas eligieron cómo meter las ilustraciones. Fue un trabajo en equipo. Para nosotras era importante la diversidad, los estilos, y era muy relevante que fuera visual para que el trabajo de Malvestida llegara en este tipo de mensajes fáciles de digerir con temas difíciles, como acostumbramos en digital. Lo llenamos de entrevistas, apoyo de expertas, incluso filósofas. Para nosotras, es un privilegio ser un espacio donde convergen muchas voces, y que se vea en este libro tan apapachador, ya que puedes saltarte los ejercicios y hacerlos después y nadie te va a juzgar.
Existir suavecito, Malvestida. Editorial Planeta, $229. Consigue tu libro aquí.