Los favoritos de Beatriz Vernon

Somos muchos los que tenemos la obsesión de pedir lo mismo en todos los lugares. La mía son los chocolatines. Acá mis preferidos.

1. Patisserie Dominique. Chiapas 157, Roma.

2. Panadería Rosetta. Colima 178-A, Roma.

3. Maison Belén. Emilio Castelar 31, Polanco.

Todos los sábados se ponen en el Parque México para dar clases de hula hula, desde lo más básico hasta trucos de expertos. Hay música, es muy divertido y además es un buen ejercicio.

Tienen un amplio menú de tés importados (que puedes oler en tubos de ensayo) seleccionados por la única sommelier de té en México, Leticia Sáenz. Recomiendo el té de cacao y el delicioso pastel de chocolate sin harina. El lugar enamora a primera vista por su decoración inspirada en Europa del Este, su balcón lleno de flores y la vista al parque Lincoln. Un gran café para pasar la tarde.

Entrar ahí es como caer en un hoyo negro y llegar a otra dimensión. Este es un oasis de tranquilidad en Chapultepec, bueno para ir a leer un ratito sobre sus coloridas bancas. El jazz parece salir de los árboles y, además, hay préstamo de libros.

Me encanta su mac n cheese y el gin tonic zooey.

La vista desde el campanario es, quizás, la mejor que hay del Zócalo de la ciudad. A un lado de la puerta principal siempre hay gente discretamente parada que da recorridos entre sus 34 inmensas campanas. Es increíble subir a esta joya arquitectónica en la que se fusionan lo gótico, barroco y neoclásico, y escuchar las leyendas y secretos del edificio.

Lo mejor: cuesta 20 pesos por persona.