1. San Francisco
Lo que nos hace increíbles: La fama de San Francisco no es por ser igual a los demás. Eso lo demostramos cuando las cosas se pusieron difíciles durante el año pasado, pues SF entró en acción con una de las respuestas más estrictas en Estados Unidos para contener al COVID. Pero eso no afectó el espíritu comunitario en el Área de la Bahía, donde las empresas se volvieron creativas para mantenerse a flote, mientras que iniciativas innovadoras como SF New Deal pusieron a los empleados de los restaurantes a trabajar preparando comida para los necesitados. Los vecinos se esforzaron para cuidarse unos a otros a través de redes de ayuda mutua de gran alcance; hasta un genio tuvo la idea de colgar iniciadores de masa madre de los árboles para que todos los que querían comenzar a hornear pudieran usarlos.
Si tan solo todas las ciudades tuvieran: Los parklets, que sirven para extender el paso libre de los peatones usando el carril que se usa para estacionarse, y que se paga con parquímetros. Los de San Francisco están bellamente diseñados y ahora hacen que la ciudad se sienta como una fiesta callejera gigante (además de que, gracias al clima, se antoja cenar al aire libre todo el año).
Vamos hacia: Una política progresista. Este antiguo enclave hippie ocupó el primer lugar en la categoría 'progresista', con el 73 por ciento de los encuestados describiéndolo como tal, y el segundo en 'sostenibilidad'. También se calificó como uno de los más incluyentes.- Clara Hogan, Time Out San Francisco