En los límites de San Jerónimo y Tizapán San Ángel, hay un parque para niños que se distingue por sus enormes áreas verdes, sus más de mil 300 árboles de distintas especies y su oferta recreativa y cultural los 365 días del año.
Antes de ser uno de los parques favoritos de los niños, el Batán era una hacienda que pertenecía a Sanshiro Matsumoto y fue utilizada para albergar a 569 japoneses afectados por la Segunda Guerra Mundial. Años después, pasó a ser propiedad de Maximino Ávila Camacho y adoptó el nombre de Quinta Ofelia. En 1953, Dolores Olmedo compró la quinta y años después le encargó a Diego Rivera la obra El espejo de la Estrella, una fuente elaborada con mosaico de mármol, ónix, y concha nácar.
El Batán está equipado con canchas deportivas de fútbol rápido, voleibol, tenis y básquetbol; también cuenta con un gimnasio al aire libre y carril para correr. Para los más pequeños, hay un arenero y distintas áreas de juego.
En sus 41,575 m² hallarás árboles como hule, fresno, olmo chino, laurel llorón, jacaranda, ginko billoba, astronómica, colorín y guayaba brasileña.
El Batán también es hogar de tortugas, aves y monos capuchinos al cuidado de UMA (Unidad de Manejo Silvestre), quienes son los encargados de preservar las especies.
Si quieres organizar alguna fiesta familiar, puedes usar las mesas, bancas, asadores y sus merenderos que se encuentran por todo el parque. Además, de servicios externos como piñatas, animaciones, banquetes e inflables. El Batán cuenta con su propia cafetería y con un salón de usos múltiples.
Recuerda que este es un espacio ecológico y 100% libre de humo, toma en cuenta que no se permite el uso de envases de plástico (lleva tus propios platos biodegradables) o aparatos eléctricos. La entrada al público general es de $20 pesos y el estacionamiento de $25 pesos por hora, los fines de semana la tarifa máxima es de $50 pesos.
Este oasis sureño es una gran opción para relajarse, caminar, practicar algún deporte o hacer una fiesta en compañía de familia y amigos. Todo rodeado de verde, en un ambiente seguro y tranquilo que disfrutarán chicos y grandes.