Posada del sol
Foto: Ale Carbajal
Foto: Ale Carbajal

16 lugares terroríficos en la CDMX que tienes que visitar

Desde casas embrujadas hasta edificios de la Santa Inquisición, conoce los lugares más oscuros de la CDMX que te pondrán la piel de gallina

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Así como la Ciudad de México tiene lugares asombrosos para disfrutar de un picnic en un parque de Chapultepec, hasta disfrutar de unos ricos taquitos en cualquier puesto callejero para bajarnos la fiesta. Pero así como tenemos lugares felices y llenos de luz, también tenemos lugares llenos de oscuridad que por más que pretendamos, ahí están.

De vez en cuando, en especial durante octubre y noviembre con la celebración de Halloween y Día de Muertos, nos damos el lujo de sacar todo lo que escondemos bajo el tapete y volteamos a lugares que están llenos de mala vibra que nos causan terror.

Si como nosotros, eres fan del turismo oscuro, aquí los lugares que tienes que conocer. ¿A cuántos has ido?

Recomendado: Turismo oscuro en la CDMX.

Lugares terroríficos en la CDMX que tienes que visitar

  • Arte
  • San Ángel
Momias de San Ángel
Momias de San Ángel

En la época revolucionaria se encontraron 11 cuerpos en el Antiguo Colegio de San Ángelo Mártir, hoy Museo de San Carmen. ¿Cómo podemos decir que las almas descansan si ni siquiera fueron identificadas? Los muertos están cerca de nosotros y conocemos muy poco. Hay muchas teorías alrededor del misterio. Algunos dicen que las tropas zapatistas depositaron los cuerpos y otros aseguran que solo eran pobladores de la zona que fallecieron ahí. Misteriosamente, las condiciones del terreno y de la capilla momificaron los cadáveres y evitaron que las expresiones de dolor se borraran de su rostro.

2. Cementerio Ameyalco: Jardín para un amigo.

Sandra Olmos y Octavio Sánchez antes se dedicaban al campo, pero motivados por la triste realidad de muchas mascotas que son tiradas a la basura, decidieron abrir este cementerio. En 10 años de servicio han recibido a más de 3 mil animales. El objetivo es ofrecer una sepultura digna y ayudar a los dueños a sobrellevar el dolor. En cada tumba se siembra un árbol y una planta, que crecen en el mismo suelo donde permanecen los restos. Una forma de entender el ciclo de la vida. Es difícil decir adiós pero reconforta saber que la muerte de nuestro mejor amigo da origen a una nueva vida. Sandra y Octavio adoran a los animales y entienden perfectamente que es imposible que ese amor se muera. Solo se transforma.

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  • Arte
  • Cuauhtémoc

Más de 70 aparatos de tortura te reciben en este recinto. Tan pronto como entras a las salas se percibe una ambiente denso —y mientras más conoces y lees se pone peor—. No es el lugar en el que quisieras estar para subir tu ánimo, pero sí es un espacio para descubrir la tan conocida pero poco profundizada cara de la época colonial. A pesar de las quejas sobre la ambientación, los puros aparatos utilizados durante la inquisición son suficientes para producir incomodidad conforme lees y conoces para qué fueron utilizados.

  • Museos y centros culturales
  • Cuauhtémoc

El misterio de la vida y el misterio de la muerte yacen juntos aquí. En la sala de fetos reposan esqueletos y embriones cuidadosamente diseccionados y conservados en una solución de glicerina. El culto a las vidas que no fueron. Mientras que en la sala de órganos, los pasillos atesoran vestigios de las vidas que se consumieron. Atrás de un cristal reluciente, casi pulcro, vemos pulmones, partes de intestinos, riñones, un estómago, un corazón y hasta un cadáver de una mujer, preservado con inyecciones de carbowax por vía vascular. El tejido de cada órgano mantiene la textura y la flexibilidad.

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  • Lugares de interés
  • Parques temáticos
  • Miguel Hidalgo

Agárrate de la mano de otras cuatro personas y no se suelten, perderse en el panteón más grande de la ciudad (en especial por la noche) es muy sencillo. Únete a los recorridos nocturnos y deja que la luz de la luna —y los guías correspondientes— te guíen por tumbas célebres y distintos lotes. Si no te animas a pasar la noche, por el día también puedes visitar (o ver tras las rejas) las tumbas de celebridades como Ángela Peralta, Diego Rivera, David Alfaro Siquieros, José Clemente Orozco, Ignacio Ramírez y Silvestre Revueltas. Recuerda agendar tu cita en grupos mayores a cinco personas.

6. Altar de la Santa Muerte

Éste barrio está bajo la protección de la Santa Muerte. La fe es lo que mueve este culto religioso con orígenes prehispánicos. Después de que Enriqueta Romero, Doña Queta, pusiera en alto sus creencias a través de un gran altar al pie de calle (Alfarería 12, Morelos), el barrio de Tepito se sumó y con grandes arreglos florales frecuentemente se encomiendan a la Santa Muerte. Ojo, pero a ella no se le piden  “milagros” sino “paros”. A pesar de que este altar es el primero y más reconocido, existen otros, como el ubicado en Nicolás Bravo 35 donde incluso se ofician misas. Más reciente, también surgieron los creyentes de El Angelito Negro, una figura desprendida del diablo. 

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7. La casa de los 300 años

Se dice que la Inquisión persiguió y ejecutó, al menos, a seis personas en su interior. Aparatos de tortura, túneles y un pasaje que conecta directo a la Catedral Metropolitana, son los mitos que rodean el lugar. Esta casa presume más de 400 años de vida en la capital y los investigadores de lo paranormal “revelan” sus secretos en octubre de cada año. Con recorridos temáticos, contacto de espíritus, sesiones de psicofonías e investigaciones al filo de la medianoche, en la llamada “casa más embrujada” de la ciudad de México, podrás aventarte un Tour Insólito. Hoy es un centro cultural donde lo más temible es que no te apuntes a sus talleres.

  • Qué hacer
  • Zona Metropolitana
Isla de las Muñecas
Isla de las Muñecas

Cuenta la leyenda de La Isla de las Muñecas que hubo alguna vez un vigilante llamado Julián Santana. Atormentado por la muerte de una niña que se ahogó entre lirios, Don Julián empezó a coleccionar muñecas que se encontraba en el canal o la basura, y las colgaba en su chinampa para ahuyentar a los malos espíritus. Julián murió ahí mismo en 2001, dejando la pequeña isla llena con estos juguetes, y convirtiéndola en todo un ícono oscuro en Xochimilco. Sin embargo, el lugar ya no guarda esa vibra perturbadora, y nos deja la impresión de ser, más que nada, una trampa de turistas mal montada.

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  • Qué hacer
  • Tlatelolco

Tlatelolco guarda muchísima Historia. Recordamos amargamente la matanza de estudiantes el 2 de octubre del 68, pero en ese mismo sitio también fue donde cayó de forma definitiva el Imperio Mexica el 13 de agosto de 1521, cuando Cortés, con ayuda tlaxcalteca, derrotó a Cuauhtémoc. Bernal Díaz del Castillo cuenta “...ese día fue tan sangriento que era imposible caminar por el lugar debido a la cantidad de cadáveres apilados». Se estima que más de 40 000 indígenas murieron ese día.”. La Plaza de las Tres Culturas retrata tres periodos y pueblos de un mismo lugar, así como sus tragedias

  • Museos y centros culturales
  • Historia
  • Cuauhtémoc

Del museo Memoria y Tolerancia, uno de los elementos de la exposición más oscuros y tétricos es sin duda el vagón original de carga proveniente de Polonia. Vagones así fueron usados para la transportación masiva de personas a campos de concentración. Sin embargo, este museo también enseña otros horrores que sucedieron en el mundo, como en Armenia, Guatemala, Ruanda y Camboya, Darfur, y la ExYugoslavia, por mencionar algunos, lo que a su vez nos hace preguntarnos ¿Cuántos otros crímenes contra la humanidad han sucedido que no han sido mencionados en la Historia? ¿Cuántos museos harían falta?

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11. Cueva del Diablo

Uno de los lugares más enigmáticos y fascinantes, así como aterradores y oscuros, de la CDMX: La Cueva del Diablo. Guarda tantos secretos como historias, los pobladores de la zona tienen cada uno la suya propia. De lo posible a lo fantástico: desde los que dicen que hay monedas de oro escondidas, a los que aseguran que se pierden niños ahí dentro. También cuentan que se hace brujería ahí dentro, y algunos hasta declaran que es un portal a otras dimensiones. Pero no hay duda es que es un lugar peligroso, y su acceso está negado para el público general, pero a nadie se le puede prohibir contar sus historias.

12. Cañitas

Una de las leyendas más famosas de la ciudad. En los 80, Carlos Trejo vivió una pesadilla en la casa ubicada en Cañitas 51 y decidió contar su historia en un libro que rápidamente se convirtió en bestseller. “Me sorprendió mucho la recepción que tuvo. Cuando me presentaron la versión final, lo primero que le dije a la editorial fue: ‘No creo que a alguien le pueda interesar’. Qué equivocado estaba. Fue un guamazo. Sobre la propiedad, yo vivo ahí y a la fecha siguen sucediendo cosas extrañas. Hace menos de un año se apareció un niño. En otra ocasión, una de las lámparas comenzó a girar muy fuerte hasta que hizo corto y las chispas cayeron sobre la mesa del comedor, formando la sombra de un ente. Es lo normal aquí. Así vivo”.

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13. Museo del Enervante / Museo del Narco

Pocos lugares más particulares y especiales en la CDMX como el Museo del Narco. Para empezar, técnicamente, sí es un museo. Tiene curaduría, fichas, y hasta un mural del ejército pintado expresamente para el espacio. Guarda una colección enorme de armas reales usadas por narcotraficantes, muchas de ellas personalizadas. También tiene muestras de diferentes drogas. La entrada está prohibida para el público general y solo pueden asistir militares, policías, y estudiantes de derecho, criminalística o psicología con previa cita.

  • Qué hacer
  • Caminatas y paseos
  • San Miguel Chapultepec

La lúgubre fachada de la avenida José Vasconcelos sigue causando misterio. La leyenda cuenta que un pequeño de nombre Marcos escuchaba voces provenientes de la casa. Un día se animó a curiosear por ella y encontró a un hombre colgado, suceso que lo marcó, ya que 10 años después regresaría para acabar con su vida como aquel. Quienes han entrado a la casa aseguran que la vibra es muy pesada gracias a las prácticas espiritistas que se hacían en ella. Actualmente, se encuentra completamente vacía y solo es posible conocer el exterior del edificio. Existen tours que visitan la zona de noche y cuentan a detalle las macabras historias que pasaron en el edificio negro.

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15. Posada del sol

La deteriorada edificación de la colonia Doctores comienza su tétrica historia con el supuesto suicidio del dueño, el ingeniero Francisco Saldaña. Se cuenta que antes de quitarse la vida en el jardín principal, también se la arrebató a su esposa e hijos. Lo cierto es que gracias al olvido, las 500 habitaciones han servido para encuentros satánicos, masónicos y rituales espirituales. También han servido de escenario tétrico para producciones como Yago (2016). Para entrar es necesario el permiso de la delegación, que muy pocas veces es respetado porque es común escuchar ruidos provenientes del edificio.

16. Palacio Negro

Inaugurado en el porfiriato, el Palacio Negro llegó a ser la cárcel más temida de México. Sus paredes contenían a los criminales más peligrosos y buscados, quienes se enfrentaban a situaciones inhumanas: condiciones insalubres, abuso, explotación y tortura en formas inimaginables. Debido a la sobrepoblación, Lecumberri dejó de ser una cárcel en 1976 para convertirse en sede del Archivo General de la Nación, órgano encargado de preservar y difundir la memoria documental del país. Los miles de documentos y papeles ahora conviven con las almas atrapadas que siguen haciendo eco en las instalaciones.

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