Lo sentimos por los puristas pero las cosas como son, aunque se encabronen: Public Image Limited es brutalmente mejor que los Sex Pistols. El mismo John Lydon, que se hacía llamar Johnny Rotten cuando lideraba el cuarteto que le mentó la madre a la Reina de Inglaterra y cantaba sus deseos por destruirlo todo, lo afirma.
Los Pistols fueron la primera boy band de la historia. Básicamente era un concepto salido de los deseos comerciales de Malcom MacLaren y diseñado según los trazos de Vivienne Westwood: “Desde un principio, se encargó de lo brillante y glorioso de los Sex Pistols, su unidad. Se la cargaron con su egoísmo de mierda. ¿Y en que acabó? ¿En hacer la ola a un ladrón de trenes? ¿A costa mía?”, expresa Lydon en sus Memorias sin censura La ira es energía, editada en español por Malpaso.
Después del último concierto de los Pistols el 14 de enero de 1978, en el Winterland Ballroom de San Francisco, John trabajó alrededor de un mes en Kingston, Jamaica, enviado por Simon Draper de Virgin Records. Su misión consistía en buscar bandas interesantes que pudieran firmar con el sello Front Line, subsidiaria de Virgin dedicada a la música reggae. La mente del ahora exvocalista de los Pistols se relajó sumergida en gigantescas pipas de agua atascadas de hierba, guitarras en efecto wah-wah, reggae y dub, mucho dub.
Este género fue la bomba que detonó la creatividad musical de Lydon contenida durante su etapa con los Pistols. De regreso a Londres, con la cabeza hasta la madre de mota y dub, Lydon fundó Public Image Limited o Public Image Ltd o simplemente PiL: “Yo quería formar un consorcio de chiflados con puntos de vista similares, dispuestos a saltar al siguiente universo sin ninguna herramienta…Y así fue, porque no seguimos un estándar o cliché musical… Era una aventura sin forma ni reglas donde la inadecuación musical no importaba. Nada que ver con el punk. En mi opinión, su perspectiva (del punk) se había hecho cada vez más estrecha gracias a la influencia del pobre Joe Strummer de los Clash”, dice Lydon.
La banda contó con una primera alineación integrada por Keith Lavine, quien tocó con los Clash en sus inicios, Jah Wobble en el bajo y Jim Walker en la batería. El nombre del grupo está inspirado en la novela de Muriel Spark, Public Image, sobre las pesadillas que puede causar el exceso de publicidad.
PiL es todo aquello que Lydon quiso dinamitar con los Pistols y no pudo. Después de todo, era una banda propiedad de MacLaren. Rock, música disco, electrónica, un hi-nrgy narcotizado y retorcido, samplers caóticos y guitarras atonales provenientes de la no wave de Nueva York, es lo que predomina en la discografía de la banda. Con un diseño minimalista y farmacéutico, los PiL se convirtieron en seminales para la iconografía del rock alternativo. Su experimentación visceral, anárquica y pop al mismo tiempo que renegaba de los acordes básicos de los Pistols, les valió el título de fundadores de lo que se conocería como post punk, volviéndose en una de las bandas más creativas e influyentes de los ochenta.
PiL y Lydon vendrán por primera vez a la Ciudad de México en un concierto cuyas expectativas apuntan a ser de lo más encabronadamente emotivas en la historia de toquines en México.