El rock psicodélico nació en los setentas como un reflejo a la liberación de los jóvenes en un contexto cuadrado y conservador. Este género se expandió y quedaron algunas raíces en bandas de rock de nuestros tiempos, que cuarenta años después tomaron un poco de la psicodelia y la adaptaron a nuevos ritmos como MGMT o Tame Impala.
Una de las bandas que sobresale en este género es el trío Dead Meadow, que se dieron a conocer con su disco homónimo y experimentaron la fama con discos como Howls From the Hills o Old Growth. Después de 17 años, la banda visita por primera vez la Ciudad de México, durante la Semana IR!, por esto platicamos con Josh Simon, vocalista de la banda, sobre su debut en nuestro país y sobre su próximo LP.
Es la primera vez que la banda visita México y todos estamos muy emocionados. ¿Qué esperan de su presentación?
Realmente nunca tenemos expectativas. Tratamos de presentar el mejor show posible, pero al llevar 18 años como banda nos gusta tomar las cosas como vienen. Nos emociona mucho ir a México, llevamos años recibiendo mensajes de fanáticos pidiéndonos que vayamos.
Hace cuatro años que no tenemos nueva música y siguen de gira, ¿cuándo tendremos nuevo material?
Estamos en medio de grabar lo que creemos que será un nuevo LP. Seguramente estará terminado para cuando estemos en México, aunque aún no estará a la venta, eso será a finales de este año o principios del siguiente. Llevamos mucho tiempo tocando así que queremos hacer algo nuevo. También tenemos muchos otros proyectos, yo he lanzado varios discos como solista y Steve Kille (bajista) graba mucho con otras bandas.
Entonces supongo que escucharemos nuevas canciones...
Seguramente tocaremos una o dos canciones nuevas. Como nunca hemos ido a México estamos planeando tocar muchas canciones viejas, los clásicos.
En una entrevista dijiste que grabaron su primer álbum en un sótano, ¿fue difícil mantener su sonido después, en estudios profesionales?
Si, grabamos el primer disco en el sótano de mis padres, era donde ensayábamos. En realidad todavía nos grabamos a nosotros mismos, tal vez somos un poco más profesionales en ese aspecto, pero tenemos nuestro propio estudio. Eso es muy importante para nosotros, queremos captar los sentimientos del momento, un estudio profesional es mucho más estresante. Con nuestro propio estudio podemos regresar al día siguiente, no tenemos la presión económica que nos llevaría a elegir una toma que no nos convence.
¿Qué han aprendido de haber trabajado con distintos sellos como Matador Records?
Fue muy padre estar en Matador, la banda creció mucho gracias a eso. Llegamos justo al final de la vida de la industria de grabación: las bandas todavía recibían dinero porque la gente aún compraba discos. Es interesante ver como todo eso ha cambiado ahora gracias al internet. La difusión que obtuvimos gracias a Matador nos ayudó mucho y ahora tenemos nuestros propios sellos, Steve Kille tiene uno que es el que ha sacado los últimos proyectos. A través de los años construimos algo importante, así que tiene sentido mantenerlo bajo nuestro control.
El año pasado la banda anunció el relanzamiento de sus primeros dos discos, ¿prefieren las versiones originales o las nuevas?
Si en vinilo y el próximo año empezaremos a hacer lo mismo con los discos que hicimos para Matador. Espero que suenen igual, me gustan mucho las versiones originales. Lo que es padre es que lanzamientos como Feathers o Shimmering King tiene algunas tomas alternativas y demos. Siempre hay algo de interesante en las reediciones.
Van a tocar como parte de un festival en un foro pequeño, ¿prefieren esto o festivales de gran tamaño?
La energía y vibra de un lugar pequeño o mediano es increíble, puedes sentir el cuarto de verdad. Hemos tocado todo tipo de shows a través de los años y todos tienen lo suyo, simplemente tratamos de tocar de la forma correcta dependiendo del cuarto. A pesar de esto, creo que nuestro sonido encaja muy bien con foros medianos o pequeños.
¿Qué podemos esperar de su show?
Somos tres: tocamos y nos divertimos. Tocamos las canciones, las alargamos, siempre nos llevan a lugares muy diferentes lo cual las hace muy crudas y reales.