Lo mejor son los chilaquiles que hace la dueña los sábados, perfectos para crudear.
Esta banda de Chihuahua se ha apoderado de la CDMX en poco tiempo. Albar Alcántar (voz) y Santiago Villalba (bajo) se han convertido en unos expertos de las fiestas en la Roma-Condesa.
Aunque al principio vivían al sur de la ciudad, rápidamente se mudaron a la Condesa. Se sintieron atraídos por la cultura y todos los artistas que viven en estas calles. “En cierto sentido es una ventaja porque todo está aquí, pero muchos otros lugares de la ciudad también deberían enriquecerse”, comenta Albar.
Se adaptaron tan bien a la colonia, que los Apolo poseen el anhelado tatuaje de pizza vitalicia en la Pizza del Perro Negro gracias a que Timo, uno de los socios, los invitó a ser la banda del mes. “Si vas pide la apolo que lleva chilorio, queso y aguacate”, nos recomienda Santiago.
Albar y Santiago aplauden que existan lugares como el Black Horse, donde las bandas pueden tocar. “Si te vas a otros lugares del país es difícil encontrar algo así. La Condesa va a ser recordada como un hito que está marcando la vida de muchos jóvenes”, comentan.
Albar aprovecha para moverse por sus calles en longboard: “La gente respeta cada vez más, y eso ayuda a que crezca la cultura del transporte personal. Me gusta el Parque México para sacar trucos”.