Si no tenías motivo para viajar a Londres, ahora lo tienes. Te decimos por qué tienes que vivir esta espectacular experiencia inmersiva escuchando "Mamma Mia" y "Chiquitita"
Después de 43 años –sí, casi medio siglo–, la banda sueca de pop más grande de todos los tiempos, volvió a los escenarios, pero esta vez lo hicieron de una manera virtual; el futuro nos alcanzó y tenemos una de las experiencias inmersivas más increíbles que hemos vivido en los últimos tiempos.
ABBA, formada por Agnetha Fältskog, Björn Ulvaeus, Benny Andersson y Anni-Frid Lyngstad, se desintegró en 1982, justo un año después del lanzamiento de su disco The Visitors. Lo que parecía una fantasía se volvió realidad cuarenta años después, justo cuando la banda presentó Voyage, su noveno disco, con el cual anunciaron el concierto digital, ABBA Voyage, en el que volverían a los escenarios de manera virtual. ABBA esta de regreso.
ABBA Voyager tendrá una residencia de 1 año en Londres, Reino Unido, y tuvo su premier el 26 de mayo en el que estuvieron presentes desde Kylie Minouge hasta los mismos ABBA de carne y hueso. Una de las noches más históricas de la cultura pop. En pocas horas, el internet se volvió loco con miles de videos y fotos del show, por lo que todos comenzamos a hacer las maletas para viajar hasta la tierra del Fish and Chips. Aquí te decimos por qué tienes que verlo.
Ya que este espectáculo fue concebido desde cero, era imposible adaptarlo a una recinto existente, por lo que se construyó la ABBA Voyage Arena, un espacio para 3 mil asistentes con pantallas de 96 millones de píxeles, 100 kilómetros de cableado y 291 bocinas que escupen nada más ni nada menos que 870 mil watts de audio. Todo pensado para ser un espacio inmersivo.
La empresa detrás de los avatares fue Industrial Light & Magic (ILM), la cual fundó George Lucas en 1975. La banda fue literalmente escaneada; se digitalizaron sus movimientos corporales y sus gesticulaciones al cantar para crear una versión joven de ellos. Además, sus atuendos —cortesía de Dolce & Gabbana— también se digitalizaron y se ven tan reales que ¡parecen irreales! (LOL). Sin olvidar los visuales que son increíbles. Esta obra de arte del mundo digital dura 100 minutos, pesa 120 Terabytes y corre a 25 Gigabytes por segundo.
Justo en medio del show, la banda hace un encore para “cambiarse de atuendo” y proyectan este corto creado por el colectivo londinense Shynola, en el que ilustran las canciones “Eagle” y “Voulez-Vous”. En este espectacular corto en 3D acompañamos a Rora en su búsqueda por un poder escondido. Su guía, una estrella de cuatro colores que resguarda los espíritus de los miembros de ABBA. Chu-la-da.
Este espectáculo cuenta con 30 mil luces controladas individualmente y 500 luces movibles, dando como resultado una experiencia nunca antes vista. En algunos momentos, las luces nos recuerdan a los Infinity Rooms de Yayoi Kusama y la instalación SKALAR de Christopher Bauder.
No necesitas ser fan para conocer la música de ABBA. Aquí escucharás clásicos como “Waterloo” y “Thank You For The Music” hasta himnos del pop como “Mamma Mía”, “Chiquitita” y por supuesto “Dancing Queen”. Una noche llena de nostalgia setentera y ochentera para bailar y cantar hasta cansarse.
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