Mantén a tu gatito saludable y libre de padecimientos para que juegue, coma y duerma con tranquilidad. Puede que la principal distracción de tu felino sea explorar su colonia, lo que conlleva a que conviva con otros gatitos, exponiéndose así a diversos virus y bacterias. Es por esto que le preguntamos al Dr. Fausto Reyes Delgado, Director Médico del Hospital Veterinario UNAM-Banfield sobre las enfermedades más comunes en felinos, cómo detectarlas y qué hacer para prevenirlas.
1. Enfermedad periodontal
“Así como esta enfermedad es una de las más frecuentes en los perros, la acumulación de placa dentobacteriana es el padecimiento número uno en gatos. Cuando la placa se acumula se genera sarro y la encía se inflama. Así que si detectas mal olor de boca o de repente tu minino deja de comer, es una señal de alerta; especialmente porque puede haber pérdida de piezas sin olvidar que las bacterias se pueden trasladar a otros órganos. Pero no te alarmes, para que no llegue tan lejos lo más importante es realizarle limpieza de dientes una vez al día (con cepillo suave y pasta dental) y proporcionarle dieta dura, con este cambio en su rutina sus dientes seguirán fuertes y sanos”.
2. Complejo respiratorio felino
“Es un poco más común en bebés y jóvenes; inclusive puede ser mortal para ellos cuando no están vacunados. El complejo respiratorio felino provoca, por su puesto, problemas al respirar, así como secreción de mucosa en nariz y ojos. Teniendo en cuenta los síntomas se entiende que el complejo afecta a glóbulos rojos y blancos, a la córnea y al aparato respiratorio. La manera de prevenirlo es vacunar a los padres y no dejar a tu mascota salir a la calle, aunque sabemos que eso les encanta”.
3. Leucemia viral felina
“La leucemia se puede juntar con SIDA y complicar más la situación. Derivado de la leucemia se pueden crear tumores en sus cuerpos (debes estar atenta y atento a este síntoma); hay vacuna para esta enfermedad. Por otra parte, este tipo de SIDA es exclusivo de gatitos, por lo que no hay riesgo del contagio a humanos o a otras especies. Desafortunadamente no hay vacuna para esta última. Entre los otros síntomas que pueden manifestarse en tu mascota se encuentran: el dejar de comer, se vuelven inquietos y tienen pérdida de peso”.
4. Otitis externa
“No es propiamente una enfermedad, pero sí es una infección que comúnmente es causada por ácaros, los cuales suelen contagiarse y multiplicarse rápidamente. Cuando tu gato padece de esto hay una secreción oscura en oídos. El veterinario determinará si tienen o no parásitos y le dará el tratamiento adecuado”.
5. Hongos en la piel
“Cuando tu mascota está en malas condiciones, tiene bajas defensas y les falta alimento es propenso a adquirir hongos en la piel. Y a pesar de que hay tratamiento para esto, debes detectarlo a tiempo para evitar contagiarte (pues sí es transmisible a humanos). Generalmente puedes darte cuenta de que el felino adquirió esto cuando hay zonas sin pelo, es frecuente que sean circulares. Para evitarlo, los animales deben tener buena alimentación, permanecer limpios (tanto ellos como el lugar en el que habitan) y tomar baños de sol”.
6. Asma felino
“El asma felino afecta a las vías respiratorias y es muy parecido al asma humano. Si tu gatito se encuentra en esta situación presentará dificultades al respirar debido a una respuesta inflamatoria de vías respiratorias. Esta reacción puede derivar de situaciones de estrés a las que hayan estado expuestos los mininos, así que cuida que se expongan al menor estrés posible. Para descartar que el gato padece asma se deberá realizar una placa radiográfica, en el caso de que se confirme el diagnostico se puede medicar”.
7. Insuficiencia renal
“Tres de cada cinco gatos, después de sus ocho años de edad, tienen probabilidades de tener enfermedad renal. Cuando el felino toma mucha agua, pierde peso y el apetito, va muchas veces al baño, tiene mal olor de boca e incluso presenta úlceras, es posible que tenga problemas renales. Para evitarlo, lo ideal es realizar pruebas de laboratorio mínimo una vez al año. Si el caso es positivo habrá cambios de dieta para aumentar la cantidad de proteína”.
Las consultas frecuentes al veterinario ayudan a detectar síntomas a tiempo. Sumado a esto, tú eres el más cercano a tu mascota, así que si notas algún cambio de rutina en ellos trata de detectar la causa y atenderlo de inmediato.