El nene, agonizante en una cama de hospital, trata de decirle algo a Ana que está postrada a sus pies. Esta escena bien podría pertenecer a Rosa Salvaje, pero es tomada de Ana, la chica bolera, la exitosa serie de internet producida por Webnovelas.
Las novelas web de esta pequeña productora son famosas por ser actuadas sólo por hombres, quienes adoptan los roles femeninos, olvidándose del pudor del vello en pecho y el bigote.
Este proyecto nació en una noche de farra, en la que un grupo de amigos comenzaron a parodiar y grabar escenas de telenovelas. Eduardo Soto, editor y diseñador de audio para televisión, decidió hacer un video con esas escenas y subirlo a la red.
"A nuestros compañeros les pareció muy gracioso y sin querer arrancamos Webnovelas. Convoqué a varios amigos, que actualmente están en el elenco, y decidimos grabar una telenovela. Cuando nos dimos cuenta, ya teníamos el primer capítulo de La bastarda", asegura el productor Eduardo Soto.
La bastarda es una historia con todos los clichés de las telenovelas, nunca falta la villana que le hace la vida imposible a la protagonista o el amor imposible. En ésta se narra cómo una joven ama de llaves se enamora del patrón y descubre que en realidad es millonaria. Fue bien recibida en la red, pues el primer capítulo obtuvo 160 mil reproducciones. Por este motivo, la historia se alargó hasta 24 capítulos.
La segunda serie Ana, la chica bolera nació gracias a uno de los personajes de ese primer proyecto, una chica que bolea zapatos y que se enamora de un cantante.
Las series de Webnovelas, galardonadas en el pasado Baja Web Fest, omiten los albures, las groserías y el doble sentido. A pesar de que los hombres interpretan el papel de las mujeres, deslindan el término "vestida" de sus producciones.
"Hay que distinguir que el concepto no es de "vestidas", ni el comportamiento de éstas, sino que es sólo una telenovela representada por hombres", comenta Diego Velázquez, quien le da vida al personaje de Ana.
Prepárate para una tarde de lágrimas, enredos y amor.