La cita era a las cinco, pero empezaron como a las seis, aunque la espera se compensó por la amabilidad del personal de Nichos. Es que ya estamos ansiosos por contacto humano, ver personas y salir a tomar un poco de aire… y muchas chelas.
El lugar es el de siempre, Nicho Bears & Bar en Londres 182 de la Zona Rosa, y así como hay que acostumbrarse a respirar bajo el cubrebocas, también hay que habituarnos a las otras medidas de seguridad para entrar al local: tomar la temperatura y usar gel antibacterial. Después hay que pagar un cover de 50 pesitos y ya entras al ambiente.
Está la música de siempre que pone en modo fiesta. Las mesas están separadas —ya saben por qué—. Para leer el menú sobre las mesas está un poco difícil, porque la luz es de antro; aunque también está la opción de descargarlo por un código QR. La carta es corta, y se aprecia que sea así, es más sencillo elegir lo que se va a comer.
Hay burritos, sándwiches, baguettes y nachos, todo anda alrededor de los $50 a los $80. Sorprendentemente la comida es buena, mi favorito fue la baguette de pechuga de pavo horneada BBQ y el sándwich de cuatro quesos. El personal, siempre atento, usa caretas y cubrebocas todo el tiempo y rondan por tu mesa, para saber si se nos ofrece algo.
El cover incluye un shot de tequila y pues me lo di. Ya entrado en calor revisé la lista de bebidas y hay de todo: vodka, wisky y cocteles con precios accesibles. Pero lo mío es la cerveza de 35 pesos. Hay que gritar mucho para poder platicar, la música sigue teniendo el volumen de antro; aunque claro que no puedes bailar. El lugar comienza a llenarse alrededor de las 8pm y asiste todo tipo de público, pero predominan los barbones.
Está un poco raro ligar mientras te comes unos nachos y conservas la sana distancia, pero el intercambio de sonrisas entre osos está lindo.
Recomendado: Conoce las tardeadas para adultos de Kinky y visita El Marra Lonchería Bar.