Réquiem tiene una filosofía que se basa en “ser fuerte para ser útil”. El entrenamiento no sólo debe servir a uno mismo sino también a la comunidad en que vivimos, según este instructor.
Comenzó a practicarlo en 2006 y desde entonces continúa con esta actividad. Los grupos son de 10 a 20 personas y dos instructores apoyan la clase.
Su entrenamiento se basa en ejercicios que emulen a los cuadrúpedos, se trabajan fuerza, saltos, resistencia, coordinación y equilibrio. Traceur Project ha sido una plataforma para alejar a los chavos de las adicciones y la delincuencia. Réquiem cuenta que incluso los policías se acercan a pedir informes, cuando antes sólo querían perseguirlos.