De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la depresión afecta a 355 millones de personas en el mundo, con casi el doble de posibilidades a mujeres que a hombres y es la novena causa principal de enfermedad y discapacidad entre los adolescentes. Estos datos extrapolables demuestran que la capacidad para manejar nuestros pensamientos, emociones y relaciones interpersonales están en una cuerda floja. Poner atención a nuestras emociones puede ser un arnés de seguridad que nos impida caer, mientras que trabajar en nuestro bienestar es una guía para nuestro andar sobre ella.
Para inaugurar una vida plena y consciente, te invitamos a —como dicta el mindfulness— prestar atención a la experiencia del momento presente con aceptación. Comienza incorporando a tu día un poco de aprendizaje espiritual, como el que se obtiene de la práctica del yoga, y otro tanto de actividad meditativa, la cual te ayudará a ver las cosas como son (no como las sientes), según la técnica budista vipassana.
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