Muy pocos son los salones de belleza, barberías o estéticas que logran hacerte el corte que tenías en mente. Sin embargo, existen lugares como The Pussycuts, un salón donde hacen maravillas con tu pelo.
En la entrada se ve un discreto pizarrón negro con el mensaje “The Pussycuts”. Al principio dudas: ¿será un bar?, ¿un salón de tatuajes? Pero cuando ves las sillas llenas de chicas con papel aluminio en la cabeza, sabes que llegaste al lugar indicado.
Nane, Romina, Mónica y Jeffry son los expertos en color de fantasía que atienden este salón desde hace tres años. Sus especialidades son los looks imposibles, como el rapado de leopardo, el decolorado ombre, balayage, desvanecidos, extensiones, maquillaje y efectos especiales.
A diferencia de otras estéticas, aquí no encontrarás revistas con tipos de cortes y peinados de 1998, a este lugar debes llegar con una idea muy clara de lo que quieres hacer con tu pelo. ¿Trasquilado? ¿Rapado? ¿Disparejo? ¿Rojo? ¡Qué importa! Básicamente el límite es tu imaginación, así que asegúrate de pedir algo más que 5cm de despunte o un tinte rubio alborada. Incluso hay clientes que llegan con fotos de Instagram o Printerest para que los Pussycuts copien el look. Claro, todo depende de lo que se pueda hacer con tu pelo.
Si vas entre semana y sin cita, puede que no esperes tanto. Si lo haces, tal vez te encuentres a Andy Velázquez, Carla Morrison, Amandititita, Elis Paprika, Randy de Molotov o a Pablo de Kudai, ya que todos son clientes asiduos.