Cocina mexicana
Foto: Mattza Tobón
Foto: Mattza Tobón

Restaurantes de comida mexicana

La comida de todos los estados de la república es la que compone la gastronomía de la CDMX

Publicidad

Descubre las loncherías, las mejores tortas ahogadas y chiles en nogada en la Ciudad de México.

Comida mexicana en la CDMX

  • Mexicana
  • Cuauhtémoc
  • precio 3 de 4
  • 4 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
Filigrana
Filigrana
Filigrana: técnica de elaborar piezas con finísimos hilos de metal, o como a la chef Martha Ortiz le gusta referirse para hablar de su nuevo restaurante, los hilos de sabor que nos unen. Audacia y diversión son dos aspectos que rodean a esta propuesta de cocina mexicana, cuyo interior parece cuento de hadas con brillo propio gracias a sus ventanales alusivos a cristales. Acomódate en los kitsch y muy acolchados sillones para iniciar con tres gorditas de maíz multicolor: negra con hongos y mucha sazón; verde con suculento queso derretido y epazote; de masa natural con crujiente chicharrón. Un par de insectos y charalitos aterrizaron en el muy fresco guacamole con habas para darle cuerpo a cada mordida y toques salados. Sí, es un arroz cremoso de $182, pero cada bocado merece un bailecito de premiación, es delicioso: abrazado por la acidez del queso chiapaneco vertido encima, pétalos de flor de calabaza con espárragos y crujiente de queso para rematar. Textura y sabor entrando en armonía en el paladar. El porkbelly aterriza con elegante sencillez, donde la proteína cede a un buen agarre semi-grasoso y el mole rosa lo hace con notas de almendra. Un gusto palpable también a la vista. Puede acompañarse del filagranita a base de mezcal con tepache, para que la espuma de sal de insectos deje sensaciones limpias. “Experiencia o vivencia dulce” para nombrar la sección de postres, un sentido muy atinado: el flan de queso estilo Chiapas con salsa de cacahuate y caramelo abraza la...
  • Mexicana
  • San Ángel
  • precio 3 de 4
  • 3 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
San Ángel Inn
San Ángel Inn
Quizá deberíamos advertir al lector: a este lugar acuden políticos y personajes que vieron su mejor vida en los años setenta. También vienen los turistas que buscan a Frida Kahlo. Y, muy probablemente, tú con tus papás. Este espacio es una atracción turística en sí misma: ex monasterio, ex hacienda colonial, ex hotel, ex espacio universitario (aquí estuvo parte de la primera Ibero) y finalmente, restaurante… un escenario por el que ha pasado todo aquel personaje que ha tenido algo de relevante en la historia mexicana del siglo XX, por lo menos. Además está en una de las zonas más hermosas de la ciudad y la comida que ofrece ha logrado respaldar una larga trayectoria y satisfacer durante décadas a una clientela que es de suyo muy exigente. Pero también representa ese México que se va quedando como reliquia de un tiempo que difícilmente volverá, como un retrato que año con año va perdiendo su colorido. Al mismo tiempo, como todo lo que acumula años, también va acumulando secretos. Aquí un consejo: cierra el menú y pide el Paillard Ranchero. Y te decimos que lo cierres porque no viene ahí: es una tradición del lugar. Lo piden los que saben. Este platillo viene a la plancha con adobo, es un corte de ternera muy suave que se recomienda término medio porque es muy jugoso. Viene acompañado de una chalupita de guacamole, esquites de la casa y un chile poblano relleno de queso, además de salsas y tortillas hechas en la cocina del San Ángel Inn. Recomendamos también la sopa de...
Publicidad
  • Mexicana
  • Roma
  • precio 1 de 4
  • 3 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
Sobre la calle de Campeche y junto al mercado de Medellín se encuentra este pequeño consulado yucateco. Es un restaurante familiar, relajado y en sus mesas disponen el semáforo de salsas de chile habanero: verde, amarilla y roja –de menor a mayor intensidad–. Las manitas de cerdo en escabeche o al pibil son una excelente manera de avisarle al hambre que pronto quedará satisfecha y para entrar de lleno al juego puedes pedir unos panuchos de cochinita pibil o de relleno negro. La carne de puerco de la cochinita está suave y desmenuzada, queda especiada de manera muy fresca pues no se les pasa la mano con el achiote y el toque de laurel está en su punto. También probamos el relleno negro en torta, ese guisado yucateco de carne de cerdo color azabache que en la boca sabe a especias sureñas, ligera y con un dejo ácido al final que encanta a los paladares. Le ponen unas rebanadas de huevo cocido que son el moño del regalado sabor de la cocina yucateca. La sopa de lima con pollo desmenuzado es rotunda en potencia cítrica, concentrada, sustanciosa y las tiras de tortilla frita le dan la textura crujiente a las sensaciones tersas de la receta; el plato es una porción completa, si eres de estómago pequeño no la consideres como una mera entrada. Otra de sus especialidades es el chamorro al pibil. Por 125 pesos te llega a la mesa la pierna del cerdito cocinada despacio y con la carne lista para separarla del hueso sin esfuerzo alguno. El sabor lleva toda la carga de aromas de la...
  • Mexicana
  • Condesa
  • precio 2 de 4
  • 3 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
Fonda Mayora
Fonda Mayora
Fonda Mayora es todo corazón: el servicio es cariñoso como una visita a casa de los tíos, las sopas son contundentes y reales (ya sabes: la papa, la zanahoria y el jitomate saben a eso que comíamos de niños, no a plastilina). En el menú se asoma la mano de Gerardo Vázquez Lugo, el chef de Nicos que, ahora, le pone el sabor mexi-tradicional a la vibra hip del barrio. Con estos sabores me refiero a la costilla de cerdo con verdolagas; al arroz ranchero (rojo, frito, sabroso); a las tetelas rellenas de frijoles con hoja santa con que te dan la bienvenida, o bien, a la gordita de maíz quebrado rellena de nopal. ¿Ya ves?, es caserito, fácil de entender y rico. Los colores de las paredes y de la vajilla de cerámica en la que comerás, sobre mesas de madera clara, son tonos pastel que van del verde menta, rosita-tipo-mamey-con-crema, hasta un azul pálido que le tira a los grises. En pocas palabras, juega en la discreta simpatía de la sencillez. Como apertura reciente, aún tiene detalles que corregir, pero, para tener una opinión definitiva sobre este lugar tendremos que volver. Sobran los pretextos para desayunar, almorzar y comer: huevos encamisados, chilaquiles, tostadas de ceviche verde y gorditas con tuétano. Por lo pronto, disfrutemos de esta novedad que pinta bien, porque derrocha buena disposición. 
Publicidad
  • Mexicana
  • Zona Metropolitana
  • precio 2 de 4
  • 3 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
Michoacaníssimo
Michoacaníssimo
Para comer birria estilo Michoacán en la Ciudad de México hay un lugar que se proclama el rey; la horaria fila de espera que se forma cada fin de semana lo sustenta. El Michoacaníssimo opera todos los días de la semana en Pedregal de Santa Úrsula. Los mejores días para una visita hambrienta son de lunes a viernes, porque sábados y domingos se convierten en un maestro teórico y práctico de cómo curar la cruda y la afluencia se cuadriplica a pesar de que el local tiene tres áreas de mesas por dentro. Si tu objetivo es reponerte, seguirla o tener una comida mexicana, abundante y casera, entonces este lugar es un imperdible para el fin de semana. Su éxito cumple 30 años de historia en 2018, cuando Juan Martín Cabrera decidió compartir una receta familiar de birria (La Huacana, Michoacán) en un puesto de calle en la misma ubicación que tiene el restaurante en la actualidad. Es una sopa que te hace perder la cabeza ya seas mexicano o extranjero, con el sabor (ligero) de chivos crecidos por el mismo proveedor de siempre, lo que asegura la calidad y preservación de la receta original. Sólo se requiere una visita para volverte un cliente fiel,  la lejana ubicación para quien no es del rumbo. La orden de birria se pide surtida ($100) pero si te freseas hay maciza ($110); el plato es muy abundante en carne y si lo crees necesario, el mesero te rellena el plato con caldo caliente. Unas gotas de limón, cebolla y cilantro son suficientes, pero no le puedes decir que no a una orden...
  • Mexicana
  • Miguel Hidalgo
  • precio 4 de 4
  • 3 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
El Lago
El Lago
Su lema es que son “El restaurante más bonito de México”. Desde su apertura en 1964 su calidad gastronómica ha fluctuado en fuertes altibajos. En algún punto se convirtió en un restaurante exclusivo para extranjeros, comidas de negocios y gente mayor, para muchos quedó en el recuerdo como el lugar donde alguna vez comieron con la familia, es un lugar que hoy sigue inspirando nostalgia. Su presencia junto al Lago Mayor del Bosque de Chapultepec ha perdurado por más de 50 años; o dicho de otra manera, es un ícono de la historia restaurantera de la Ciudad de México. El nombre Félix Candela te sonará más familiar si lo relacionas con el edificio de la Bolsa Mexicana de Valores; el Mercado de Coyoacán; así como las estaciones del Metro San Lázaro, Candelaria y Merced; todas construidas por el mismo arquitecto que le dio forma a El Lago, con su diseño característico de paraboloide hiperbólico. Esto resultó en un estético restaurante con una de las mejores vistas panorámicas a un costado del lago, posteriormente retocado por Sordo Magdaleno, arquitecto de los hoteles Presidente Intercontinental y Sheraton María Isabel. En El Lago no encontrarás propuestas sofisticadas de gastronomía, sino comida mexicana. Hoy, por qué no, se enfoca en la cocina mexicana contemporánea, esa que involucra ingredientes de cualquier parte de México y presentaciones llevadas a la región más colorida y vistosa para el ojo. Aún se mantiene ideal entre los restaurantes para turistas porque el...
Publicidad
  • Camiones
  • San José Insurgentes
  • precio 1 de 4
  • 3 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
Mr. Corn
Mr. Corn
Los esquites de Mr. Corn son de grano pequeño y su juguito es abundante en limón, lo que le da una acidez que se disfruta. También tienen diferentes salsas de mayonesa, de chipotle y de varios chiles. Puntos extra por tener la opción de crema.Aseguran que son el primer food truck que hubo en la CDMX y tienen algunos argumentos que podrían comprobarlo. Es una receta que ha perdurado a lo largo de los años y sobre todo, que son ahora una flotilla de vochos que pulula por las calles del sur y poniente de la ciudad. Consulta su página web para que ubiques sus movimientos. 
  • Mexicana
  • Doctores
  • precio 1 de 4
  • 3 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
Doña Carmelita tiene mas de 10 años en la esquina de Dr. Lavista y Rafael Lucio preparando los tacos de bistec más jugosos de la zona. Se comen con papas que doña Carmelita guisa para darles más sabor, también ponle un poco de nopales y salsa sin escatimar. Otra de sus especialidades son las quesadillas fritas. Visitar los Tacos Carmelita es obligatorio en un día de luchas en la Arena México, aunque el pretexto sobra cuando ves el tamaño de lo que prepara, un verdadero aniquilador del hambre por sólo 15 pesos. Además de antojitos, también encontrarás una plática amena con la propietaria del puesto.
Publicidad
  • Mexicana
  • Zona Metropolitana
  • precio 1 de 4
  • 3 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
Hamburguesas al Carbón Torreón
Hamburguesas al Carbón Torreón
Tal cual Oxxo, este tipo de restaurantes rápidos han invadido la Ciudad de México y es algo que amamos. Hamburguesas al Carbón Torreón se encuentra frente a la Plaza Tepeyac y cumple con una de las funciones que todos los mexicanos buscamos cuando comemos: comida rica, barata y rápida. Su menú es ultrabásico. Hamburguesas sencilla, con queso, doble queso, con piña, queso piña, doble queso y piña —hawaiana como le dicen en mi pueblo— y refrescos. Te formas, pides lo que quieres, pagas, se te entrega el refresco y esperas a que el cocinero te pregunte los vegetales para tu hamburguesa (lechuga, jitomate, cebolla, chiles) y los aderezos (salsa de tomate y mostaza). En lo que esperas puedes ver y oler el carbón cociendo la carne. Si bien la presentación no es la mejor, su sabor lo compensa todo. No sé dónde compran la carne o cómo la preparan para que tenga el mismo sabor y textura suave. Como es un restaurante pensado para que comas y te vayas hay pocas mesas, pero hay repisas para que pongas tu refresco. Incluso hay gente comiendo dentro de sus autos, así que no te limites. Pedí una de doble queso y piña, pero como tengo tanque grande tuve que volverme a formar para pedir otra. Vale totalmente la pena aguantar el calor del lugar, y el humo de la parrilla por una hamburguesa.
  • Mexicana
  • Zona Metropolitana
  • 3 de 5 estrellas
  • Crítica de Time Out
La Playa
La Playa
Es el vecino del embarcadero del Lago de los Reyes, un lugar dedicado a la comida prehispánica que además de tener una notable vista, ofrece más de 70 cervezas de todo el mundo. La Playa ha dado servicio por más de 40 años con un menú variado en entradas y platos fuertes trabajados bajo la esencia del auténtico restaurante bar. Entra al pequeño santuario de la chela artesanal, donde las etiquetas internacionales brillan gracias a unos foquitos y están acomodadas en una especie de altar. Alemania y Bélgica llevan la ventaja en número de opciones, pero nada le piden a una oatmeal stout lágrimas negras, además de que tienen su propia cerveza clara y obscura. Ya sea que te acomodes al interior del lugar, afuera junto a la fuente o en el área vip (terraza), ojea la carta sin mayor complicación y busca lo que el antojo dictamine. Hay carne, enchiladas, quesadillas y caldos; las especialidades que hacen guiño a la cocina prehispánica son los chinicuiles, escamoles, ahuautles y gusanos de maguey.
Recomendado
    También te puede gustar
    También te puede gustar
    Publicidad