1. The Bear
La primera temporada de esta serie era insuperable, o eso pensábamos hasta que este año nos llegó la segunda, que sin duda lleva al programa y a los personajes a lugares altísimos. La historia sobre un chef en duelo tratando de levantar el lugar de sándwiches de su fallecido hermano se convierte ahora en una incómoda representación de la industria culinaria, retratando también la salud mental y los traumas familiares. Jeremy Allen White (nominado a todos los premios existentes) nos lleva a los rincones más íntimos y oscuros de Carmy, quien, además de autosabotearse, logra que sintamos empatía, amor y comprensión por su personaje. El guion del episodio seis se debe convertir en el mejor ejemplo para las personas que quieren dedicarse a escribir, es para estudiarse hoja por hoja, porque es tan intenso, dramático e incómodo. ¡Perfección de principio a fin! Hay que mencionar que dura lo que una película, pero jamás lo sientes, y sin dar spoilers, la cantidad de actores famosos que aparecen en dicho capítulo es para volverse locos, "who's who en Hollywood", básicamente. Qué belleza lo que hicieron con los personajes de reparto: Ayo Edebiri demostrando por qué es la chica más buscada de la industria y Ebon Moss-Bachrach como Richie llegó a convertirse en mi favorito cuando en la primera no podía soportarlo, y es que hasta Swiftie nos resultó ser. Es importante recordar que esta serie se vende como comedia y no como drama.