¿Por qué Una película de Minecraft es ideal para los creativos?

El estilo de comedia del director y guionista Jared Hess es realmente único. Debutó en 2004 con la película de culto Napoleon Dynamite y luego dirigió en México Nacho Libre, protagonizada por Jack Black (una cinta que ya podemos decir clásico). Ahora regresa con Una película de Minecraft, la adaptación del juego más vendido de la historia, con más de 300 millones de copias vendidas. En esta cinta vemos a cuatro inadaptados, Garrett (Jason Momoa), Henry (Sebastian Eugene Hansen), Natalie (Emma Myers) y Dawn (Danielle Brooks), que son transportados al Overworld, un mundo de cubos donde la imaginación y la creatividad son tu activo más valioso. Para regresar a casa, deberán dominar este nuevo entorno y enfrentarse a amenazas como Piglins y zombies de ni más ni menos Steve (Jack Black), el legendario protagonista de Minecraft. 

Por esto mismo hablamos con el mismísimo Jared Hess y Torfi Frans Olafsson (desarrollador de videojuegos y director creativo de Minecraft) durante su visita a México para la premiere de la película.

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Napoleon Dynamite se estrenó hace 20 años y dejó una marca en mi generación. ¿Cómo se puede hacer una película de gran presupuesto que logre un impacto similar en la actualidad?

Jared Hess: Creo que, mientras hacíamos esta película, siempre tuvimos presente que Minecraft es un videojuego muy especial para mí y mi familia. Tiene un poco de todo, pero lo más importante es la creatividad: poder entrar al juego para crear y sobrevivir. Nos gustaba esa idea y queríamos plasmarla en la película. Además, construir personajes como Garrett (Jason Momoa) o Dawn (Danielle Brooks) fue muy divertido. La clave es hacer algo personal, ya sea en una película independiente o en un filme de estudio. Si tiene algo tuyo y te importa lo suficiente, creo que al final funcionará.

¿Qué fue lo más difícil de trasladar de este universo al filme? ¿Hubo algo que dijiste: "Debo entender esto para poder integrarlo"?

Jared Hess: Por eso tuve la ayuda de Torfi Frans y de Mojang (estudio que desarrolla Minecraft). Ellos fueron nuestros socios desde el inicio; no podríamos haber hecho esta película sin ellos. Han construido y vivido Minecraft por tantos años que fue increíble sincronizarnos. Torfi y yo nos escribíamos en la noche para discutir ideas: "¿Deberíamos meter esto? ¿Cómo hacemos esto otro?". Queríamos ser fieles al espíritu y la física del juego, pero llevarlo a otro nivel. Lo creamos juntos, y me parece increíble.

Torfi Frans Olafsson: Fue genial porque, al inicio, vimos a varios directores y nos decían: "No puedes hablarles directamente, debes comunicarte con su asistente". Eso me parecía estresante. Pero cuando conocí a Jared, congeniamos de inmediato con la idea de hacer la película como si fuera un filme independiente. Había escenas que él filmaba con su iPad, mucho antes de que hubiera cientos de personas trabajando en la producción. Fue un proceso colaborativo con el equipo de efectos especiales, vestuario y arte. Jared dirigió la película, pero en un momento parecía que todos éramos miembros de una banda de jazz, unidos, sobre todo cuando estábamos comprendiendo el mundo de Minecraft.

En la película, Steve quiere ser algo que no le permiten ser. ¿Les ha pasado algo similar en sus carreras?

Jared Hess: Claro, todo el tiempo. Siempre quiero hacer tonterías y a veces me lo prohíben. Hay ciertos chistes que me gustaría incluir, pero algunas personas dicen: "No creo que funcionen". Lo importante es ser fiel a tu visión y a lo que amas. La pasión es clave. En este filme trabajamos con tantas personas talentosas que logramos hacer cosas muy divertidas.

¿Crees que la manera en la que se cuentan historias sobre personajes inadaptados ha cambiado desde Napoleon Dynamite hasta ahora?

Jared Hess: Sí y no. Para mí, sigue siendo lo mismo. Me atraen los personajes subestimados porque siempre me he sentido así, como que no encajo. Todos los seres humanos, en algún momento, nos sentimos diferentes o fuera de lugar. Es genial tomar a un grupo de personajes que están pasando por momentos difíciles y llevarlos a un viaje donde deben ser creativos para sobrevivir. Es un mensaje muy fuerte que se aplica en la vida real. En verdad creo que el mundo sería un mejor lugar si todos fuéramos más creativos

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