El 17 de diciembre de 1989 se estrenó la serie Los Simpson, inspirada en la familia de Matt Greoning, creador del show. Este año la familia amarilla llegará a la trigésima temporada y aunque es motivo para una gran celebración Matt se enfoca en su nueva aventura animada llamada (Des)encanto, show en el cual demuestra que alguien con una carrera cimentada puede renovarse.
(Des)encanto presenta a la princesa Bean —que junto a su amigo Elfo y su demonio interior, Lucy— se revela ante un mágico mundo medieval machista que la oprime, poniéndola en situaciones incomodas en las que tendrá que empoderarse para ser libre.
Para que nos contaran más sobre esto, fuimos a la ComicCon 2018 para platicar con el director Matt Groening y el guionista Josh Weinstein sobre este esperado proyecto que Netflix estrena el 17 de agosto a nivel mundial.
Recomendado: 10 series animadas para adultos.
¿Cómo nace la idea de (Des)encanto?
Matt Groening: Hace años empecé a escribir en una libreta todo lo que se me ocurría para futuros shows. Quería hacer algo sobre personajes míticos con duendes, hadas, ogros y princesas, pero muy alejado a los cuentos tradicionales.
Este show está muy esperado, nos podrían contar más sobre la historia.
Matt Groening: La princesa Bean es el centro de atención de (Des)encanto y junto a ella siempre está su compañero Elfo y Lucy, su demonio interior. Bean los necesita a su lado porque la complementan y demuestran que no es la típica cenicienta. Queríamos a una mujer fuerte que tuviera muchos errores. Soy fan de entregar lo contrario a lo que la gente espera.
Regresando a lo que les contaba sobre mi libreta, en ella dibujé a personajes como Elfo, que fue el primer personaje que creé en mi vida, durante mis clases en la secundaria. Me acordé de él y dije: “es momento de regresarlo”. A Lucy la creamos pensando en un personaje tan enigmático y cool que pareciera algo que la gente se tatuaría. Curiosamente me informaron que una mujer en Colombia se hizo un tatuaje, aún sin ver la serie.
Josh Weistein: A mí me gustaba la idea de que algunas princesas no podían gobernar, solo estaban ahí, pero no les entregaban el poder. Eso me gusta, el conflicto de que a pesar de que Bean es más inteligente y preparada que su hermano, ella jamás podrá ser la que manda.
Matt Groening: Otro punto para Bean es que la presentamos cuando está en la búsqueda de ella misma y le pusimos personajes que se parecen a la gente que conocí a esa edad. Recuerdo que no sabíamos que queríamos hacer de nuestra vida, pero sí lo que queríamos esa noche; un show sobre una mujer con pensamiento actual en un mundo medieval mágico. Es muy interesante como podemos explorar todo eso.
Foto: Cortesía Netflix
Toda su carrera la hicieron en un canal de televisión tradicional y ahora estan en una plataforma online, ¿qué diferencia encuentran?
Matt Groening: Trabajar en Netflix es un sueño porque ellos estaban entusiasmados con todo lo que les presentamos y se emocionaron más cuando les dijimos que íbamos a cambiar de dirección. Es increíble la idea de contar una historia de una manera distinta y contarla en 10 episodios sin comerciales, nunca hubiéramos podido contar esta historia en un canal de televisión normal.
Josh Weistein: Para mí el hecho de no tener comerciales es algo mágico porque no interrumpes la historia para mostrar un rastrillo o un jabón.
Matt Groening: Cuando vas a comerciales tienes que recordarle a la audiencia en que te quedaste y ya no tenemos que hacer eso, nos permite continuar y que todos los personajes crezcan.
Netflix es famoso por no censurar, ¿eso les dio más libertad?
Matt Groening: No existe la censura, incluso al principio del show pensamos hacerlo menos arriesgado, pero nos pidieron hacerlo atrevido así que nos sentimos libres aunque descubrimos algo con lo que no nos habíamos topado: ¡No todas las groserías funcionan para hacer chistes! Teníamos un dialogo en el que el personaje decía “mierda” y lo eliminamos porque sentimos que no era real y preferimos que se sintiera autentico y no solo decir groserías por ser algo para adultos.
El equipo de trabajo de (Des)encanto tiene mucho talento joven, ¿fue algo que estaban buscando?
Matt Groening: Es genial trabajar con gente nueva porque sus ideas nos refrescan a nosotros que somos considerados “Old Farts”. A ellos le gustan las cosas que presentamos aunque nuestras referencias siempre sean viejas.
Josh Weistein: Para no sentirme abuelo, en nuestro staff tenemos mitad gente de arriba 40 años y del otro lado gente de menos de 40 años porque tengo una teoría; cuando trabajé en el show Gravity Falls todos tenían como 20 años, eran tan divertidos y sabían cómo mostrar emociones en sus historias. Todo eso se debe a que los escritores y animadores jóvenes crecieron viendo Los Simpson u otros shows animados para adultos mientras que yo crecí viendo Scooby Doo, por lo que ellos tienen un sentido del humor único y natural.
Tocan un tema muy interesante, impresionar a la gente que tiene 30 años viendo Los Simpson, ¿cómo lo consigues?
Matt Groening: El secreto es que tratamos de hacernos reír entre nosotros; los guionistas quieren hacer reír a sus compañeros guionistas. Más que pensar en cómo reaccionará el público nos enfocamos en provocar al que tenemos al lado y eso da un resultado orgánico sin querer. Mi parte favorita es cuando tenemos lectura de guion por primera vez y nos sentamos con los actores que lo interpretan. Cuando logras que John DiMaggio —voz de Bender en Futurama— se muera de risa, es como estar en el cielo.
Foto: Cortesía Netflix