Hojas de Otoño la nueva película de Aki Kaurismäki

Antes de dedicarse al cine, el reconocido director finlandés, Aki Kaurismäki, trabajó como albañil, cartero, lavaplatos y crítico cinematográfico. En los ochenta, junto a su hermano, fundó la productora Villealfa y fue gracias a esta que empezó a trabajar como director, filmando alrededor de 20 películas, las cuales le han otorgado diversos premios en Cannes y nominaciones al Oscar. Esta semana estrena Hojas de Otoño, nueva película que ganó el premio del jurado de la pasada edición del festival de Cannes. El filme sigue a Ansa (Alma Pösty) y Holappa (Jussi Vatanen), dos solteros de clase baja que se dedican a trabajar sin parar. Ellos ya aceptaron que pasarán su vida en soledad hasta que se conocen en un bar y deciden darle una última oportunidad al amor, pero ciertos malentendidos y adicciones harán que tengan que luchar más de lo esperado.

En la vigésima primera edición del Festival Internacional de Cine de Morelia, la protagonista de Hojas de Otoño, Alma Pösty, presentó el filme, el cual se llevó el premio a la Película Internacional Favorita del Público. Time Out México platicó con la actriz sobre la película que ya se puede disfrutar en México.

¿Cómo es que Aki Kaurismäki te invitó a trabajar con él?
Nunca había conocido al director antes, aunque amo sus películas. Un día recibí una llamada que decía que Aki Kaurismäki quisiera invitarte a comer; para mí, eso fue surreal. Fuimos a comer, no podía creer que estaba con Aki en persona. Traía pintura en sus manos y también estaba Jussi Vatanen, quien interpreta a Holappa en la película. Con Aki, platicamos de muchas cosas, de la vida. Al final nos presentó la idea de una película que aún no tenía guion, solo la idea, pero ahí nos preguntó si queríamos formar parte de ella y ese fue otro momento de, ¿Qué está sucediendo? Eso fue el inicio de la aventura más loca y un sueño hecho realidad que jamás ni siquiera soñé por ser tan lejano; en mi mente no existía la posibilidad de poder estar en una película de Aki Kaurismäki.

Y ahora estás aquí en Morelia presentando la película…
Ya sé, ¡qué emoción! He viajado por todo el mundo presentando la película; es un viaje surreal que no termina. Leí que no te dieron el guion hasta que empezaste a filmar para que todo fuera más orgánico y real. ¿Es correcto eso? Un año después de tener esta comida con el director, recibimos el guion, y es una obra maestra, como un diamante o una perla con la vista más hermosa y claridad que he leído en mi vida. Es el maestro de pocas palabras, pero que las escoge perfecto. El guion era pequeño, pero lo tenía todo. Además, cuando lo leí, me di cuenta de que no había nada que necesitara añadir o cambiar porque todo lo que necesitaba estaba ahí. Nada de inventar porque todo estaba ahí. Tuve que leerlo de manera cuidadosa porque todas las pistas del personaje estaban ahí. Nos pidió también no ensayar antes de filmar, o sea teníamos que aprendernos las líneas, pero no demasiado, pero yo tuve que hacer algo porque soy una ñoña, entonces vi todas sus películas porque tenía como el sentimiento de que era el eslabón o cadena de todos sus trabajos y necesitaba estar en conexión con sus trabajos sin copiar lo que alguna actriz ya había hecho, entonces que las tuvieran su propio lenguaje y yo tener el mío, había una conexión y esa fue mi manera de prepararme. También fui a observar a bares como a los que los personajes frecuentan para ver cómo toman los vasos, brindan y al supermercado donde ella trabaja para sentirme familiar. Entonces empezamos a filmar y nos dio otra sorpresa, que quería que todo se hiciera en una sola escena, por lo que no podíamos ensayar ni repetir; había mucha presión y si es un poco abrumador al inicio, pero se convirtió en algo maravilloso cuando entiendes cómo trabaja y que está sucediendo algo especial enfrente de la cámara y ese momento se convirtió en algo precioso porque cuando lo repites y repites empieza a perder esa magia y sin profundidad.

Pero tú eres actriz de teatro, ¿Entonces cómo fue para ti no ensayar?
Es un proceso diferente; si vengo del teatro y he usado los métodos que estudié, pero también sé que cada director tiene algo especial y su estilo. Los últimos años me he dedicado a trabajar solo enfrente de la cámara y ya creé mi única forma de trabajar que se ajusta a los directores con los que trabajo. Oye, pero en la película tienen a un perro, ¿Cómo es trabajar con un animal y hacer solo una escena sin poder repetirla? Bueno, ella es muy talentosa, tiene mucho ritmo y tuvo varias ideas que resultaron brillantes. Su nombre es Alma, como yo, y es la perrita de Aki; fue adoptada de Portugal y es bastante adorable. Creo que entiende lo que su papá busca en el cine. La admiro bastante.