Harrison se despide de Indiana en exclusiva con Time Out México

La primera vez que conocimos a Indiana Jones fue en 1981, aunque este icónico personaje nació en los setenta en la mente de George Lucas, inspirado en los héroes de las novelas Pulp. En unas vacaciones en Hawái, Steven Spielberg le contó a Lucas su deseo por hacer una película que tuviera la esencia de James Bond y fue ahí cuando el papá de Star Wars le contó sobre este profesor aventurero. La película Indiana Jones y los cazadores del arca perdida no solo se convirtió en la cinta más exitosa de 1981, sino que obtuvo nueve nominaciones al Oscar incluyendo Mejor película y se llevó cinco premios técnicos. Así nació una lucrativa saga que está por estrenar su quinta entrega en la que conoceremos a un Indiana Jones maduro, pero con su misma habilidad para descifrar los secretos más complejos y salir vivo de las peores amenazas. 

Stivi de Tivi platicó en exclusiva con el primer actor Harrison Ford y el director James Mangold (Ford vs Ferrari) sobre el estreno de Indiana Jones y Díal del destino.

En la película nos presentan la posibilidad de ir al pasado si encuentras las claves de un artefacto milenario. Pretendamos que tú, Harrison Ford, tienes el artefacto en tus manos y te vas al pasado justo al momento en que un joven Harrison Ford recibe el guion de una película llamada Indiana Jones y los cazadores del arca perdida, ¿Qué le dirías sobre interpretar a este personaje?
Harrison Ford: mmm, ¿qué le diría?

James Mangold: ¡Qué lo acepte!

Harrison Ford: Por supuesto, claro. Haz todo lo que puedas para que te permitan protagonizar esta película. Recuerdo que cuando leí un guion me pareció masivamente divertido. Tenía todas las señales para ser un increíble filme. No podía esperar para poder trabajar en ella. Y si volviera a ese momento cuando estaba leyendo el guion volvería a sentir los mismos sentimientos. Pude ver el placer que le daría esta película a la audiencia y eso quería provocar. 

Hablemos de los primeros 25 minutos de esta entrega, los cuales me recordaron porque amaba las películas de Indiana Jones. Toda esa emoción, esa adrenalina, todo lo que deseaba encontrar en una película como esta, pero luego me muestran un lado del personaje que no habíamos explorado. ¿Cómo decidieron explorar esto?
James Mangold: Fue justo por lo que tú nos estás describiendo. Quería darle a la audiencia lo que estaban esperando. Mi papá era esa persona que a veces nos sorprendía diciendo: esta noche comeremos el postre antes de la cena. Entonces quería entregar un delicioso postre al inicio, que todos tuvieran ese dulce que estaban deseando, ese sundae de fresa que tanto anhelan. Eso me dio permiso de después tomármelo con un poco de calma para ir desarrollando la historia que quería porque el público ya estaría satisfecho. También ayudaría a entender como Indiana ha cambiado de ese momento y también el mundo porque del inicio al tiempo en que se desarrolla la película han pasado 30 años y todo se maneja de manera distinta. El estilo visual del inicio tenía que cambiar para finales de los sesenta y crear un shock. Esto es algo que solo puedes hacer en el cine porque no se puede en el teatro, pasar de un momento a otro. Justo ese momento fue una gran inspiración para mí cuando estaba construyendo la película ya que era una herramienta perfecta para mostrar lo que el personaje ya no tiene, la espontaneidad de su juventud se ha escapado. No quería centrarme solo en un momento porque también quería copiar el formato de las películas que ya habían hecho.

Hablemos de Steven Spieblerg, quien no dirige por primera vez un filme de Indiana Jones. ¿Cómo fue trabajar en una película de esta saga sin Spielberg presente?
Harrison Ford: He pasado tantos años con Steven aprendiendo lo necesario para hacer cine y ese beneficio me ha ayudado para traerlo a esta. Eso hizo que Steven estuviera presente o se sintiera presente durante todo el rodaje. Ha estado presente en mi vida desde hace 40 años por lo que no lo extrañabamos en el filme ya que estaba ahí de muchas maneras. Spielberg es productor ejecutivo de la película por lo que la última palabra siempre la tenía él. Trabajó junto a James en el guion, estuvo al tanto de cualquier cosa que hacíamos en el rodaje y sentí su cariño por el proyecto de inicio a fin.

James, ¿tuviste algunas reglas de cómo hacer una película siguiendo el estilo de Spielberg incorporando el tuyo?
James Mangold: Fíjate que yo no lo vi de esa manera, pero esa fue una de las razones por las que acepté estar en el proyecto, no me hicieron sentir que tenía que ser un director distinto para hacer una película que pertenece al mismo universo. Yo soy un director de la vieja escuela y si no me crees compárame con los directores actuales. Estoy entregado a la manera clásica de hacer cine y todas las películas que inspiran mi trabajo son filmes de hace cincuenta y sesenta. La voz y creatividad de Spielberg ha estado en mi mente durante todos mis trabajos desde el inicio. Nunca sentí que estuviera trabajando en una especie de copia a las otras películas. Nunca me dijeron que tenía que probarles que podía hacer algo totalmente diferente o que debía hacer un trabajo que fuera carente de mi presencia, que la gente ni supiera que estaba ahí. Amo el estilo de la saga de Indiana entonces lo seguía con mi manera de ser. Algo importante que hacemos tanto directores como actores en el oficio es aprender, cada día de rodaje aprendemos y eso me encanta, nunca sabemos todo por lo que en este filme me sentía como primerizo porque entrar a este género a esta mitología me hizo crecer. 

Harrison, ya volviste a interpretar a Han Solo, a Rick Deckar, a Indiana Jones. ¿Existe algún otro personaje que quisieras volver a interpretar?
Harrison Ford: Nunca he sido ambicioso a la hora de interpretar personajes. Lo que me interesa es la historia que apoya al personaje, lo que la historia dirá del personaje es lo que me importa. Entonces cada decisión que he tomado a la hora de regresar a interpretar un personaje que hice en el pasado está basada en la calidad del guion, de las personas involucradas y no una ambición ciega. He seguido esta manera desde hace casi 50 años asegurándome de que voy a trabajar con el mejor material que puedo encontrar rodeado de la mejores personas que puedo tener para que eso facilite tu trabajo y entregues lo mejor que puedes entregar.