Entrevista con Ernesto Contreras por Tengo que morir todas las noches

Guillermo es un joven que llega a CDMX para estudiar periodismo en los ochenta, pero ahí descubrirá un movimiento underground de libertad que rompe los esquemas sociales y culturales, Guillermo conocerá personas únicas que se reúnen en el bar “El nueve”, un espacio especial en la zona rosa que le da cobijo a todas las diversidades sexuales y de género. Esta es la trama de la serie Tengo que morir todas las noches, adaptación del libro homónimo de Guillermo Osorno que por fin estrena sus ochos episodios en Amazon Prime Video. Por esto platicamos con el director Ernesto Contreras (Sueño en otro idioma) sobre esta producción por la cual ganó un premio en el festival francés de la ciudad de Lille.

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Hemos visto la historia de la comunidad LGBT+ desde la mirada externa (como Estados Unidos, Londres, España), pero no había una producción que hablara de cómo pasó en el país, ¿Cómo nace este proyecto?

Fíjate que cuando estábamos terminando Asesino del olvido, Jorge Tijerina me comentó esta idea de hacer una adaptación del libro de Guillermo Osorno, me invitaban a desarrollar y demás, por supuesto fue un sí rotundo inmediato porque como bien dices, creo falta mucho por contar respecto a esas otras partes de la historia de nuestro país, esas partes que tienen que ver con la comunidad y que coincide con una búsqueda personal que ya había comenzado con mis películas Sueño en otro idioma o Cosas Imposibles, ahora se daba esta oportunidad para hacerlo en una serie.

¿Qué tan difícil fue adaptar todo lo que contiene la novela de Guillermo Osorno?

Fue un trabajo arduo con el equipo de guionistas para contar las crónicas de Guillermo, plasmar su experiencia, las anécdotas que cuenta, todos los personajes, todo eso encapsularlo en ocho episodios, que son ocho horas de contenido. Necesitábamos respetar el drama, tener personajes que atrapen, que te interese seguir sus conflictos. Este fue un viaje increíble. ¿Cómo se decide que Guillermo sea la mirada que nos va a llevar por toda la serie? Lo que tiene que ver con Guillermo está inspirada en el prólogo del libro que es el propio Guillermo Osorno contando su experiencia, pero el personaje de Guillermo solo es como una entrada a la serie porque es una historia muy coral sobre esta tribu de disidentes. Iremos conociendo toda la historia de cada uno de ellos. Son muchos personajes y te puedo decir que cada vez que veo el capítulo 8 no puedo contener las lágrimas porque es muy emocionante y ya amas a los personajes, ya sabes todo lo que han vivido. Cada uno de los personajes puede conectarnos de formas distintas, te puedes identificar con uno, con la otra o con el otre. Yo estoy muy contento, muy orgulloso el resultado y celebro que ahora las plataformas y los estudios están abriéndose poquito a poquito a contar otras historias.

Este es un trabajo más atrevido, no tiene pudor y no es como que sea la primera vez que presentas escenas sexuales o cuerpos desnudos en tu trabajo, pero aquí es de una manera distinta, ¿Cómo fue para ti esta experiencia?

Y espérate a que veas la serie completa. El tono ira subiendo. Desde que se conceptualizó la serie se buscó que fuera una serie autentica, sin pelos en la lengua, como dices sin pudor porque de esa manera era la época, estamos hablando de un momento en el que había todo un movimiento. Veníamos de ver la primera marcha llamada "la marcha homosexual" del 78, había mucha revolución en cuanto a la liberación femenina y sexual, los hippies, todo eso tiene que ver con esa generación de los años 80. Tenía que ser así y todos estuvimos de acuerdo tanto el estudio, los productores, los actores, el equipo creativo. Quisimos normalizar por completo lo que ha sido un tabú no y que decir no pasa nada, no pasa nada si vemos a dos señores dándose un beso o dos señoras.

Hablemos de Silvia Navarro porque conocemos su trabajo, su trayectoria, pero aquí está como nunca la hemos visto, ella está impresionante en este personaje y se ve que ella lo está disfrutando.

Sí, yo creo que Silvia está en un gran momento. Yo hice la película Papá o mamá  y ahí conocí a Silvia porque no nos conocíamos personalmente, nunca habíamos trabajado juntos y fue un descubrimiento padrísimo en términos de química, de conexión, de creatividad, de ganas de hacer muchas cosas. Nosotros ya estábamos preparando Tengo que morir todas las noches y de pronto fue como, ¿Y si invitamos a Silvia? ¿Querrá? ¿Podrá? ¿Su agenda lo permitirá? ¿Está dispuesta a hacer un personaje así? Porque su personaje tiene un conflicto tremendo y ella lo hace espectacular. Platicamos con Silvia y ella me dijo: maestro a lo que usted me invite. ¡Yo voy a estar ahí! Eso fue muy bonito. La verdad es que tanto con Silvia con Cristina Rodlo, Humberto Busto, José Antonio toledano. Entonces se logró un ensamble padrísimo. Siempre digo que una de las cualidades que más admiro y aplaudo de un actor o una actriz es su valor, su arrojo para decir: me voy a transformar en esto, me voy a convertir en este personaje. Me voy a comprometer con esta historia y fue lo que pasó con pues te puedo decir que con todos los actores y actrices que están en la en la serie.

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