El club de los Graves, la serie protagonizada por el cantante Carlos Vives

Amaranto Molina (Carlos Vives), regresa al colegio de música que donde estudio, pero ahora como profesor. Lo que no esperaba es que las reglas han cambiado y todo gira alrededor de las fórmulas que su director, Mr. Kramer (Julián Arano), implementó en la que solo cierto número de alumnos privilegiados pueden formar parte del grupo de la escuela, los agudos. 

Los alumnos rechazados por no cumplir con los estándares son tomados por Molina y apodándolos los graves, quienes aprenderán una manera distinta de vivir y hacer música. Esta es la trama de El club de los Graves, una serie musical de Disney+ que acaba de estrenar su primera temporada y que consta de 10 episodios. Las canciones son compuestas y producidas por el ganador de 17 premios Grammy, Carlos Vives, por lo que platicamos con él.

¿Cómo te has enfrentado a los Mr. Kramer de tú vida? Esas personas que han querido imponer un ritmo.
Diciéndoles que NO. Siguiendo el camino que tú crees. Me he enfrentado a muchos sobre todo cuando hice mi propuesta musical al inicio de mi carrera, pero era tanta mi emoción de hacer lo que yo sentía que no valoré sus comentarios. Lo que yo sentía en mi corazón era más fuerte, aunque no sonara a lo que sonaba lo demás. La fama no era lo que motivaba, yo quería hacer feliz a la gente con la que crecí, la gente que amé toda mi vida. Entonces yo quería traer esos ritmos, esos sonidos a la música actual. Claro que los Kramers me odiaban y no entendían, ¿No quieres ser famoso y triunfar? Me preguntaban. Yo les respondía, mi éxito es la felicidad que le llevaré a esta gente y eso fue lo que hice no escucharlos y crear. 

Los primeros minutos de la serie nos presenta a tu personaje poniéndole atención a los sonidos de la calle, de la gente, de la ciudad y eso nos dice mucho de él. ¿Tú eres igual? ¿Escuchas los ruidos que te rodean para meterlos en tus canciones?
Totalmente, es folklore y tienes que entender que existen dos lugares, la industria y el folklore. Cuando yo empecé a grabar los vallenatos me decían, eso no es folklore y estaban en lo correcto porque es lo que hace un músico como Alejo Durán, quien era un campesino y al levantarse oía a las aves y hacía canción inspiradas en el canto de las aves. Las canciones más viejas de nuestras culturas están relacionadas con los ríos, los campos, el ganado, eso es el folklore. Ese es el origen de la música. La música es la lengua común de todos los seres humanos. Vivimos en una torre de babel y creemos no entendernos, pero la música es lo único que nos une. Entonces lo que mostramos en esa escenas es justo eso, aunque bueno también hay que entender que el personaje tiene unos demonios por ahí internos, pero tenemos esa escena para mostrar el origen de las inspiraciones y los ritmos y es lo que este profesor enseña a los alumnos. Encontrar la naturalidad de la música, su lado orgánico y como ser originales. 

Justo esta explicación que me das es lo que hizo que me interesara la serie, la manera en la que cuentan cómo funciona la música, de dónde viene, cómo usar tu inspiración. Tiene elementos didácticos que ayudan a aprender y es algo muy tuyo, ¿Esos elementos tuyos al hablar de música es algo que tu improvisaste, añadiste o cómo es que entran ahí?
Fue de los escritores de la serie, pero para esto me investigaron y me reconocieron como soy yo. Tomaron mis experiencias en la música y tal cual cuando yo estaba encontrando hacer mi propio folklore fue la misma manera en la que queremos que los alumnos encuentren su pop o ritmo. Esa información está en el guion, mis experiencias se les entregó para que formaran parte de la historia.  

¿Qué opinas de esta oportunidad que tienes para explicarle a las personas, grandes y chicas, la manera de crear música?
Es divino, me encanta y sobre todo que lo hacemos de una manera natural. Cuando yo decidí meterme en el vallenato estuvimos experimentado hasta crear un pop y muchas nuevas generaciones tienen mi origen como base. El chiste es entrar en el mundo de la música y ella sola te va mostrando las ramas. A mi el ballenato me dijo: tengo unos primos que son del sur de Estados Unidos y es un folklore criollo, ambos hablan en distinto idioma, pero se conocen. Además, la música cubana también tiene elementos que tú eres colombiano entenderías. Con la música tienes un pie en el caribe y también en los andes. La música por más pequeña que sea, muy de tu pueblo al final te va a conectar con un universo porque los ritmos forman parte de la música del mundo. La industria es la que nos ha puesto muros y límites. La industria es cómo estas personas cercan sus árboles para que no estén cerca de los árboles del vecino. Ponen madera, púas y muchas cosas para que por el exterior no estén juntos, pero por abajo las raíces se unen, conectan, son una misma. Y no te cuento de la música mexicana porque nos quedamos tres horas platicando.