Cuando Estados Unidos le robó a México los territorios del norte, un forajido mexicano llamado Joaquín Murrieta comenzó a robar a los ricos para dárselo a las personas que lo habían perdido todo. Este caudillo conoce a Carillo un hombre que busca destruir al ejército americano por lo que deciden unirse (no muy seguros al principio) para defender al país justo en un momento donde la fiebre de oro y xenofobia está por todas partes.
Estamos apunto de conocer el nacimiento de la leyenda de Joaquín Murrieta, quienes algunos historiadores lo han llamado el Robin Hood mexicano gracias a esta nueva serie de Amazon Prime Video. Para conocer más de esto, platicamos con el gigantesco elenco de esta producción que está cargada de acción, aventura y sangre.
¿Se imaginaron alguna vez trabajar en un proyecto como este? ¿Qué es lo que sucedió para que en su carrera puedan tener esta mega producción?
Juan Manuel Bernal: Uno provoca esas cosas haciendo mi trabajo y dando lo mejor de mí. Cuando me enteré fue porque me ofrecieron hacer el casting, me preparé, hice varias pruebas. Era pandemia y yo estaba fuera de la CDMX, me sacaron del lugar en el que me encontraba y ya que me contaron todo acepté porque me gusto la historia y porque veía que esto sería algo muy grande. En especial de trabajar en un western, soy fan de este género desde niño por mi papá. Vi todas las películas con él. Desde hace mucho tiempo tenía ganas de hacer uno y por fin ya hice check con esta gran serie.
Emiliano Zurita: Es de esos proyectos que tan solo al leer el casting descubres toda la calidad que tiene con un tono específico bien atractivo que es fiel a la vida de ese entonces con toda su rudeza y crudeza. Es California del siglo XIX. Al conocer al equipo detrás de esta producción descubres que son personas que estudiaron la época, investigaron toda la historia y el entorno sociopolítico, hasta se aprendieron las leyendas.
Alejandro Speitzer: Para mí como actor mexicano me pareció emocionante encontrar una historia con un abanico de posibilidades, lleno de etnias, diversidad y de personajes llenos de detalles que les dan color, no son blanco y negro. Carrillo, mi personaje, no sabe qué es lo que quiere, desconoce si la venganza lo hará feliz o más miserable. Cuando me llegó la posibilidad de interpretarlo mi deseo por darle vida fue el más grande de toda mi carrera.
¿Qué opinan de que ahora el público exige que los actores se parezcan a los personajes que interpretan, en cuestión que sean de la misma ascendencia?
Steve Wilcox: Yo soy mixto, mitad venezolana y mitad gringo. Mi personaje es un gringo en tierras mexicanas. Yo hablo mejor el español que el personaje, pero me inspiré en mi papá que era un americano que nunca dejó de tener acento a pesar de hablar perfecto español.
Becky Zhu Wu: De la misma forma que Adela es de ascendencia China que creció en México tal cual es mi vida y creo que la razón por la que me identifiqué con ella es porque al igual que ella yo también pude aprovechar esas dos culturas y usarlas como ventaja y no como desventaja.
Emiliano Zurita: Yo conocía a Paty Ortiz, la directora de casting por la película de El Baile de los 41 y justo David Pablos es un director que busca personajes y es honesto con eso por lo que ambos buscan un actor que les entregue lo que desean sean actores o no como en el caso de Backy, que supieron cómo sacarle ese lado histriónico que ella desconocía, ella lo hace espectacular. Mi punto es que me sentía seguro porque sabía quienes estaban detrás del proyecto y lo riguroso que son con el talento. La serie se ve diversa, cuidada y muy representativa de lo que era california de esa era.
Siguiendo con esta idea, ¿Cómo conseguiste entrar a un proyecto tan grande?
Becky Zhu Wu: En verdad que no tengo idea de cómo llegué a este proyecto porque yo no soy actriz. Vivo en Yucatán, muy lejos de las oficinas de castings, pero una amiga fue la que se enteró que buscaban a una persona a alguien parecida a mí. La directora de casting me buscó y la verdad me dio miedo al principio, pero hice una prueba, me pidieron hacer otra, luego me volaron a CDMX y gracias a todo eso es que entré a este gran proyecto.
Me llamó la atención que casi toda la serie fue filmada en exterior, ¿Cómo fue trabajar en esos lugares?
Juan Manuel Bernal: Las locaciones fueron en Durango, Puebla, Hidalgo y Pachuca, entonces estuvo increíble. Tener la oportunidad no filmar en sets y poder ver el cielo es una experiencia que pocas veces me toca vivir.
Steve Wilcox: En mi caso el no ser mexicano, pero venir tantas veces a este país es un lujo sobre todo para poder conocer la magnitud de este país. Tantos distintos lugares, climas y naturaleza, para mí fue cada día una aventura porque conocí algo nuevo de este país y la verdad me falta muchísimo por conocer.
En la serie los vemos usando pistolas, peleando con cuchillos y corriendo de explosiones, ¿Cómo fue la preparación para lograr que sea como algo que hacen todos los días?
Juan Manuel Bernal: Esa es la magia de la serie. Si nos preparamos, la verdad es que una cosa es verla y otra hacerla. Para mí fue como ¡En la madre, ¿En qué me metí?! A Becki no le costó nada de trabajo, ella ya lo lleva en la sangre. Era buenísima con las armas, las espadas, al montar el caballo, todos le batallamos con eso y ella a la semana ya estaba por todos lados arriba de él.
Becky Zhu Wu: Mucho se debe a que yo de pequeña entrené artes marciales porque era una niña con mucha actividad, luego lo dejé, pero jamás me imaginé que eso me serviría como ventaja en un futuro. Al usar las dagas mis movimientos eran simples para mí porque mi cuerpo ya sabía cómo hacerlo. No todo fue sencillo, la pistola me costó trabajo porque eran pesadas y todo el tiempo tenía mi mano torcida, pero en el rodaje tenía que hacer como si fuera experimentada. Me lastimé la mano con las pistolas. La escopeta era de mi tamaño, entonces cargar una era muy difícil.