Desde 1994 Cinemanía Loreto ha sido uno de los refugios para los amantes del cine de la CDMX, un lugar donde encontrar películas que no estaban anunciadas en ninguna otra cartelera. 22 años después, se renueva y el cambio le sienta muy bien.
Ahora cuenta con cuatro salas equipadas con proyectores digitales, nuevas butacas —mucho más cómodas— y un nuevo decorado. Cada una tiene una programación y personalidad propias: en la sala clásica se proyectan los estrenos más importantes, mientras que la sala insólita está dedicada al cine mexicano. La sala inesperada está pensada para aquellos que desean explorar películas experimentales y la sala ecléctica se enfoca en el cine de género.
La carta del bar también se reinventó con cocteles de la casa como y tu mamá también o cronos, así como baguetes y sándwiches como el Ciudad de Dios, y se va renovando con nuevas creaciones constantemente. También ofrecen cervezas artesanales y mezcal de una cooperativa oaxaqueña. Como es costumbre, puedes entrar a la sala con tus bebidas.
Pero la remodelación no implica que Cinemanía se deslinde de sus tradiciones. Los costos de los boletos se mantienen iguales para cualquiera de las cinco funciones que hay cada día: $60 la entrada general, $40 para estudiantes y adultos mayores. Además se pueden comprar bonos de 10 boletos por $300. Por si fuera poco, cuenta el concepto permanencia voluntaria, en donde el espectador disfrutará de un día completo de cine ilimitado a tan sólo $90, en un horario de 12 a 9:45pm.
La programación también se mantiene fiel al principio de exhibir cintas que no se encuentran fácilmente en salas comerciales; incorpora retrospectivas, ciclos temáticos y matinés. Además de nuevas dinámicas como la Carte Blanche, en la que un director o actor mexicano invitado programa sus películas favoritas cada mes, y los martes con M de Mórbido, dedicados al cine de terror.
Cinemanía Loreto respeta y celebra su larga tradición de ser el punto de reunión de cineastas, actores y escritores, sin perder de vista su objetivo de convertir una salida al cine en una experiencia especial. Una buena opción al sur de la ciudad para todos los cinéfilos de hueso colorado, en la que cada día encuentras algo distinto.