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[title]Ana de la Reguera es una actriz mexicana que aún vive del éxito de las telenovelas que hizo hace 15 años. Ella divide su tiempo entre México y Estados Unidos, donde sigue luchando por obtener el papel de sus sueños en una producción Hollywoodense, aunque cada vez es más difícil, ahora que tiene 40 años y se está acabando sus ahorros.
Como su trabajo lo es todo, no ha tenido tiempo para encontrar el amor y tener una familia. Esto parece el guion de una serie dramática y desconsoladora, pero no, se trata del programa Ana, que fue creado, producido y protagonizado por Ana de la Reguera. Platicamos con la veracruzana sobre los miedos de plasmar su vida personal en la pantalla chica.
Ana fue una grata sorpresa y me recordó mucho a la serie de la BBC, Episodes, en la que Matt LeBlanc nos presenta su versión en ácidos de él mismo. Aquí se ve a una Ana de la Reguera arriesgada, atrevida, sin miedo a burlarse de sí misma, ¿por qué decidiste crear y protagonizar un proyecto como este?
Fíjate que no he visto Episodes, pero ya se me antojó echarle un ojo. Ana nació por mi necesidad de querer hacer un personaje complejo, y es que estuve a punto de hacer un par de personajes parecidos, pero al final no quedé en esos papeles y tenía ganas de jugar con la creatividad para explorar muchas cosas artísticamente como poder bailar, cantar y hacer un personaje con un sentido del humor negro. Yo soy un poco todo eso, por eso creé estos sueños en ácidos que quería realizar. Este proyecto nació hace siete años y fue porque en ese momento mi serie favorita era Louie, que estaba inspirada un poco en la vida del comediante Louis CK, y me encantaba ver la parte oscura e íntima de una persona a la que pensamos conocer; de cierta manera estamos entrando de una forma voyerista en la vida de alguien. La gente tiene conceptos míos totalmente diferentes y qué mejor que decirles: ¡Esta soy yo y tengo los mismos miedos e inseguridades que tú!
Para burlarte de ti mismo debes de estar preparado en muchos sentidos y más si es algo que se verá en muchas partes del mundo, ¿qué tan cómoda te encontrabas cuando la hiciste?
Siempre he estado muy cómoda en ese aspecto, y también es importante recalcar que solo una parte está inspirada en mi vida. Le dejo una duda al espectador para que ellos piensen si todo lo que presento es real o no. Lo que sí me costó trabajo fue representar a mi familia, meter mi papá, mamá y hermana, porque uno es responsable de uno mismo, pero quise ser valiente y presentar eso que te molesta de tu familia y te quieres burlar. Ellos se portaron increíbles porque saben que lo hice con respeto, cariño y es, de cierta manera, un homenaje a ellos.
Foto: Cortesía Comedy Central.
Me llamó la atención que en la serie hay influencers, youtubers y gente de las redes que son como una amenaza para que consigas trabajo, ¿por qué meterlos? ¿Ellos en realidad te ganaron alguna chamba?
Lo que ven en el primer episodio, en el que me toca competir por un trabajo y lo termina ganando una influencer, es real en cierto aspecto. En verdad lo perdí contra una actriz con muchos followers, pero los guionistas y yo pensamos que sería más divertido y denigrante para mi personaje que lo ganara una figura de videos que una actriz. Los influencers me han ganado muchas campañas de publicidad, que antes era una muy buena fuente de ingresos para un actor. Eso me duele. Ni modo hay que adaptarnos a esta vida.
El nombre de los episodios tienen un juego de palabras muy divertido, ya que todos terminan con tu nombre, pero los que más me gustan son “MariguANA” y “LesbiANA”, ¿cuál era la necesidad de tocar estos temas?
Todos tenemos muchos secretos que no compartimos, no todos somos blanco y negro, tenemos muchos colores dentro de nosotros. Trabajamos mucho para presentar a un personaje que no pareciera que está teniendo una crisis existencial por probar cosas nuevas, al contrario lo está pasando bien; está, por primera vez en su vida, permitiéndose descubrir y vivir las cosas sobre las que tiene curiosidad y ver si ese es el camino que le gusta o no, si eso la hace feliz o no. Todos se pueden divertir con estas anécdotas, sobre todo porque son cosas que hace una señora cuarentona que está viviendo una adolescencia tardía, y puede permitirse jugar con las cosas que no hice de joven. Las nuevas generaciones son más abiertas y se dan esos permisos y dije: ¡Me perdí de todo eso!
Ana. Estreno: Comedy Central y Prime Video. Lunes 20 de abril.