5 razones por las que nos emociona ver Neon Genesis Evangelion en Netflix

En 2015, la humanidad hizo algo imperdonable y Diosito se enojó, así que mandó a un ángel para acabar con la población mundial, pero no contaba con que somos muy inteligentes y sobrevivió la mitad.

Como no íbamos a dejar de hacer por lo que Dios se enojó, se ideó una forma de repeler a los ángeles y así sobrevivir a sus ataques; por eso inventaron los EVA, robots biomecánicos que deben ser piloteados por niños de 14 años —aquí es cuando la cosa se pone intensa—.

La historia conecta bien con los mexicanos debido al tabú de la religión, el retar a Dios y las peleas entre EVAs y ángeles, que son totalmente una maravilla. Aunque la historia es atractiva, al final no entendiste nada.

Estos servidores de Dios tienen varias formas —no, no son rubios ni tienen los ojos azules— y diferentes ataques, pero todos se caracterizan por crear un escudo llamado Campo AT (Absolute Terror) con el que repelen a sus enemigos.

Sus nombres hacen referencia a La Biblia; por ejemplo, Sachiel es el tercer ángel en aparecer; su nombre significa Cobertura de Dios. Durante la serie conoceremos a 18 ángeles que van desde un hoyo negro hasta un cristal azul en forma de octaedro.

Más allá del creepy fanservice que ofrece, la serie cuenta con bastantes personajes femeninos que poseen altos rangos y son las cabezas en la toma de decisiones para mantener a la humanidad con vida.

Misato Katsuragi es la jefa de operaciones tácticas en NERV —organización encargada de repeler a los ángeles—, por lo que tiene que idear cómo se combatirá a estos entes; Ritsuko Akagi es la jefa del Departamento de Desarrollo Tecnológico y encargada de los EVAs.

Por otro lado, Rei Ayanami y Asuka Langley Sohryn —junto al joven Shinji Ikari—, son los niños encargados de pilotear las EVAs.

Evangelion trabaja en varios niveles; nos aturde cognitivamente con sus constantes referencias filosóficas y religiosas; nos deprime al mostrar a niños de 14 años —con problemas personales— a tomar decisiones que repercutirán en la humanidad; y nos deleita con las mejores peleas de mechas, llenas de artillería pesada, un cuchillo que vibra a alta frecuencia y hace cortes moleculares, rifles de positrones y todos los golpes y sangre que nunca pudiste ver en los Power Rangers. 

Hermoso.

Después de 26 capítulos, 14 mangas, cuatro películas y un videojuego, al terminar no entenderás nada, porque es tan compleja que a los simples mortales se nos dificulta entender a la primera —quien diga lo contrario es un fantoche—, lo que hace que te den ganas de volverla a ver.

En tu primer reencuentro descubrirás más piezas del rompecabezas para entender Evangelion. No te desesperes, no eres el único que se quedó —o quedará— con pokerface.