El edificio que alberga al museo fue construido en 1914 por el ingeniero Alfredo Navarro Branca, quién construyó la Casa Cortés Schereiber y la Casa Navarro Branca en Guadalajara, y fue el encargado de remodelar el edificio del Banco de México en la CDMX.
Tras algunas remodelaciones, en 1937 se convirtió en sede de la Universidad de Guadalajara. Después de un periodo activo, la universidad lo destinó en 1994 como un espacio dedicado al arte y la cultura, y se transformó en el Museo de las Artes de la Universidad de Guadalajara, mejor conocido como MUSA.
El museo cuenta con una sala de exhibición permanente y 11 temporales. Resguarda piezas de artistas como Jaime Tafoya, Gabriel Mariscal, Martha Pacheco, Lucía Maya, Marcos Huerta y Javier Arévalo, pero es famoso por los murales El pueblo y sus falsos lideres y El hombre, creador y rebelde, de José Clemente Orozco.
Alrededor de las exposiciones, se ofrecen talleres relacionados que van desde clases de pintura hasta cursos de escritura. Además tienen proyecciones de películas, conferencias y presentaciones de libros.